Echaron a Pipo Gorosito de Alianza de Lima

Almería

Néstor Gorosito fue destituido como entrenador de Alianza Lima el pasado domingo, tras la eliminación del Alianza de Lima en las semifinales de los Play Off de la Liga 1 de Perú. El conjunto aliancista perdió en penaltis 5‑4 contra Sporting Cristal tras empatar 4‑4 en el global, y pese a que Gorosito ya había renovado su contrato para 2026, el club decidió prescindir de sus servicios. Durante su etapa al frente del equipo, dirigió 55 partidos oficiales, con un balance de 28 victorias, 16 empates y 11 derrotas. La eliminación en semifinales fue el detonante principal de su despido, junto con el hecho de que el equipo no logró asegurar un ingreso directo a la fase de grupos de la Copa Libertadores 2026, lo que fue considerado un retroceso en la planificación del club.

El que fuera entrenador del Almería, además de su paso por Alianza Lima, ha tenido una amplia trayectoria como entrenador en varios clubes de Sudamérica. Dirigió equipos como Argentinos Juniors, donde comenzó su carrera como técnico, Nueva Chicago, Rosario Central, Lanús, Gimnasia y Esgrima La Plata, y River Plate en Argentina. También tuvo experiencias internacionales al frente de clubes como Xerez y Almería en España, Universidad de Chile y San Lorenzo en Chile, y en Paraguay con Olimpia. Su carrera se ha caracterizado por tomar equipos en situaciones complicadas y buscar consolidarlos en las ligas locales e internacionales.

Alianza apostaba por su experiencia

Néstor Gorosito llegó a Alianza Lima a mediados de 2024 y estuvo al frente del equipo hasta su despido, por lo que dirigió al club durante aproximadamente un año y medio. En cuanto a logros deportivos, Gorosito logró mantener a Alianza Lima competitivo en la Liga 1 peruana, llevándolo hasta las semifinales de los Play Off en 2025, aunque no consiguió el título. También aseguró que el equipo permaneciera en los puestos de vanguardia, compitiendo por clasificación a torneos internacionales, aunque finalmente no logró el ingreso directo a la fase de grupos de la Copa Libertadores 2026, lo que fue uno de los factores que motivó su salida.

El club peruano había depositado su confianza en el que fuera entrenador rojiblanco y había ampliado su contrato pero no lo dudó a la hora del despido corriendo con los gastos de la ampliación de contrato que ambas partes habían acordado. El entrenador argentino siempre afronta grandes retos en su carrera y es valiente a la hora de decantarse por clubes que siempre exigen mucho en el apartado deportivo. Ha sido una constante en su carrera luchar contra los elementos y su aventura en Perú no ha tenido el final que esperaba.