Fútbol

Un Almería del pico de Butarque al tran tran

El equipo se ha caído y solo ganaba en Andorra por dos golpes de calidad de Arribas

El Almería de La Rosaleda nada que ver con el que vencía en Leganés. / LaLig

Almería

Cuando el Almería se paseaba por Butarque ante la mirada de asombro de su presidente en el único partido al que asistía como visitante: todo era pasión rojiblanca y alegría. El equipo tocaba el cielo con una rotunda victoria y viajaba a Ceuta para completar medio partido para ser líder y allí cambiaba todo. Perder el liderato en el Alfonso Murube marcaba al equipo. Fue un golpe del que no se ha recuperado, ya que ha encadenado su peor serie con una sola victoria en Andorra y dejando su lugar en la Copa del Rey en Elda.

Perder la oportunidad de colocarse líder en Ceuta ha pasado una factura enorme, ya que el equipo pasaba del pico de su velocidad de crucero a competir al tran tran, sin ese cambio de velocidad que mataba a los rivales. Tras Ceuta, el Huesca defendiendo el bloque bajo dejaba a los rojiblancos sin marcar por vez primera en LaLiga y a renglón seguido caían eliminados en Elda en un partido donde los suplentes no dieron el paso al frente que se esperaba. Rubi anunciaba que iban justos de fuerzas. Y tanto.

El mejor Almería fue el de Butarque

Mohammed Al-Khereiji fue el más feliz en Leganés. Bajaba al vestuario a felicitar a sus muchachos y se hizo la foto con ellos. Pasaba por Butarque un equipo que apuntaba a líder con el medio partido pendiente en Ceuta. Encadenaba 5 victorias en el Mediterráneo y fuera de casa era fiable y contundente. Se competía a doble velocidad en los partidos y los rivales quedaban sin respuesta. Volaban por el campo y no perdonaban en ataque. Su caudal de juego era inagotable y la velocidad de crucero se había convertido en un salir a los partidos: a toda máquina que los hacía letales.

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Perder en Ceuta ha dejado secuelas

El medio partido del Murube puso a toda la Segunda División pendiente del Almería ya que jugaba para liderar la competición. Estaba a un solo gol de la gloria y el Ceuta les penalizaba en la primera oportunidad que tuvo. No aparecía el equipo de Leganés que tanta falta hacía y un penalti inexistente arruinaba el éxito con una derrota que parecía intrascendente y ha dejado secuelas. El entrenador salía con aquello de que lo importante es ser líder o segundo al final: no colaba. El clamor por el penalti inventado tapó las carencias del equipo y de su entrenador.

El equipo se ha caído física y anímicamente

Tras Ceuta, el Huesca dejaba seco al Almería ante su afición. El equipo estuvo plano en lo mental y en el apartado físico. Tenía razón el entrenador: iban justos por LaLiga. El empate sabía a derrota por la falta de ocasiones de gol que antes sobraban. En Elda marcaba Soko en la Copa y el equipo no daba la talla ante un 1ª RFEF. Se encendían las alarmas y se apagaban en Andorra con dos golpes de calidad de Sergio Arribas para volver a vencer. El Almería no estaba bien. Burgos y Málaga mostraron las carencias del equipo sin Bonini en defensa, y el Almería competía al tran tran a años luz de aquel de Butarque.

Tony Fernández

Redactor de Deportes de SER Almería. Llegó a...