El Almería sale nuevo del taller

Almería

Si llegaron justos al parón a nivel mental el Almería saldrá de talleres como nuevo. Otra cosa es que el equipo haya tocado techo en lo físico y tenga que retomar la famosa velocidad de crucero. Rubi recibe este martes a la plantilla con la esperanza de que hayan descansado y liberado la mente. Sin olvidar los últimos partidos donde se ha perdido la frescura y el equipo ha mostrado una imagen muy por debajo de la mostrada cuando la velocidad de crucero alcanzó su plenitud.

Ya no se generan tantas ocasiones de gol en los encuentros y se han vuelto a producir fallos en defensa que le han costado goles de regalo. Se ha perdido esa quinta velocidad en los partidos y las bajas se acusan en exceso. El equipo acabó el año para entrar en talleres y si era para una mano de pintura (mental) hay que ser optimistas, pero si había que tocar el motor (lo físico), malo, porque ha perdido la frescura y toca echarse a temblar porque en Segunda se compite a toda máquina.

Ya no se cambia de velocidad

El Almería ha dejado de ser ese equipo capaz de someter a sus rivales en los partidos. Salir a por la victoria convencido y con una punta de velocidad capaz de poner de rodillas a los rivales. Pasaba cuando iba acumulando triunfos en casa, y lejos del Mediterráneo era un equipo sólido. El empate en casa ante el Huesca y las derrotas frente a Ceuta, Burgos y Málaga, sembraron de dudas al entrenador y a su staff técnico, sobre si todo respondía a un cansancio mental o el apartado físico ha bajado. Hay que tocar madera.

Se generan menos ocasiones de gol

Cuando Rubi iba a la sala de prensa del Mediterráneo con más de 15 saques de esquina y unas cifras de remates a portería que daban miedo, todo eran buenas noticias. Algo pasó después de ganar en Butarque que fue el mejor partido de la temporada. No ha trascendido si el equipo tocaba techo en Leganés y tenía que venir una caída. Lo único claro es que ya no se genera tanto de cara a gol y se han vuelto a regalar tantos infantiles como a final de la pasada temporada y comienzos de esta.

La velocidad de crucero no aparece

Aquel medio partido del Murube cambió la dinámica de un equipo que iba a toda máquina y asombraba a la categoría. Jugó en Ceuta para ser líder y luego tuvo dos jornadas para acceder al ascenso directo. Ya no era el mismo Almería. Rubi lo dejaba claro: “vamos justos” y si era a nivel mental toca pasar página, pero si entra en juego el apartado físico hay que preocuparse, ya que vienen partidos de categoría frente a Granada, Mirandés y Depor donde se necesita la mejor versión de un Almería que debe salir de talleres a tope.