Objetivo Almería 2026: ¿cómo se arregla el tema de la afición en casa?

Almería

La Liga de nuevo está a la vuelta de la esquina y el Almería debe levantarse lo antes posible después de dos derrotas seguidas en Segunda División. El equipo rojiblanco de Rubi no se fue de vacaciones en plaza de ascenso directo por sus propios errores, aunque queda mucha competición por delante, tiempo de sobra para corregir y volver a ser ese Almería contundente en las dos áreas, mensaje que dejó el entrenador catalán en la rueda de prensa después de perder en La Rosaleda ante el Málaga en el último partido de 2025 antes del parón navideño.

Hay que reaccionar y volver a ganar. Y es ahí donde la grada del Estadio de los Juegos Mediterráneos jugará un papel muy importante en los partidos en el recinto deportivo de la Vega de Acá, donde el Almería 25-26 tiene un objetivo claro para el nuevo año en casa y el nuevo año comienza como local el próximo sábado, día 3 de enero, ante el Granada de Pacheta.

Objetivo

El reto es consolidar grandes entradas en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, donde la afluencia, por un motivo u otro, no está acorde con las aspiraciones del Almería que lidera el presidente Mohammed Al-Khereiji. El inicio de la segunda vuelta del curso en el Campeonato Nacional de Liga en Segunda División está cada vez más cerca y será el momento de que todos juntos vayan de la mano para crear ese ambiente de gala en el recinto deportivo de la Vega de Acá.

Estas han sido las entradas en el Estadio de los Juegos Mediterráneos en lo que va de temporada antes del parón navideño: Albacete (15.119 espectadores), Racing de Santander (14.328), Sporting (12.588), Zaragoza (13.231), Castellón (12.258), Eibar (11.631), Cádiz (13.884), Huesca (11.810) y Burgos (11.028). Así las cosas, la media de espectadores en los nueve encuentros que se han jugado en el recinto deportivo de la Vega de Acá es de 12.875 aficionados cuando la capacidad total del estadio es de 18.331 espectadores.

Futuro

Está claro que lo de la afición en casa se ha convertido en un tema de estado en las oficinas del Estadio de los Juegos Mediterráneos y más cuando las dos últimas entradas no han llegado ni a los 12.000 espectadores. Huesca (11.810 aficionados) y Burgos (11.028) fueron los dos últmos encuentros que cerraron 2025 en un estadio que necesita más aficionados.