Hace semanas que el equipo aragonés tiene la posibilidad de atar su salvacióin y asegurarse su décima temporada en segunda, pero da la sensación de que la plantilla se ha dejado llevar. Estancados en los 49 puntos han dejado escapar varias oportunidades para finiquitar el curso, pero no ha sido así. Todo lo contrario, sobre todo por la dolorosa y humillante derrota por 0-3 ante el más que descendido Alcorcón.

Parece que de esta próxima jornada, la antepenúltima, no va a pasar; bien por méritos propios o por deméritos de los rivales. El Real Zaragoza cerrará la jornada el lunes en Oviedo y con un punto le valdrá, pero podría saltar al césped del Tartiere con los deberes hechos, ya salvado. Para ello, tres posibles y diferentes cábalas. La primera, que la Real Sociedad B no le gane el viernes al Almería; si no se cumple esta, el domingo hay dos posibilidades más, bien que el Sporting de Gijón no venza al Girona o el Málaga no puntúe en Tenerife. Con cualquiera de estas tres opciones, el Real Zaragoza se habrá salvado. Si no tendrá que hacerlo por méritos propios el lunes no perdiendo en casa del Real Oviedo.

De no remediar varios milagros, aunque en el fútbol puede pasar cualquier cosa, la permanencia quedará hecha este próximo fin de semana. Es el último paso que falta para que se produzca el cambio de propiedad en el club. Jorge Mas y el grupo de empresarios con los que llega de la mano pasarán a controlar el 51 por ciento del accionariado y podrán empezar a poner las bases del próximo proyecto del Real Zaragoza con Raúl Sanllehí como director general y cabeza visible del nuevo Zaragoza. El ejecutivo catalán lleva semanas ejerciendo su cargo en la transición hacia la nueva propiedad, aunque hasta que los números de la clasificación no digan lo contrario no puede comenzar a ejecutar muchas de las decisiones que ya ha tomado.

Jornada de fiesta

La plantilla guarda este martes descanso y el miércoles comenzará a preparar la visita a Oviedo con un entrenamiento vespertino, a las 17,30 horas, en la Ciudad Deportiva. JIM espera recuperar a Cristian, Nieto y Vada, aquejados la semana pasada de un proceso febril, y comprobará la evolución de Álvaro Giménez y Bermejo, ambos con problemas musculares.