Pacientes crónicos, infancia y tercera edad: los más afectados por la ola de calor

Zaragoza

Hay que estar atentos a los termómetros y tomar precauciones, sobre todo los niños, los ancianos y los enfermos crónicos. Las altas temperaturas provocan un agravamiento de las enfermedades respiratorias y vasculares, y también golpes de calor.

Debido al calor, en 2019 se registraron 159 atenciones, 87 el pasado año. Varias personas tuvieron que ser ingresadas.

Pacientes crónicos

El cuerpo reacciona como puede ante un calor extremo. Pedro Parrilla, médico de urgencias, señala que puede haber afectaciones directas "por el sol, por la alta temperatura, por problemas de sudoración y en pacientes crónicos que, bien por su medicación o por su edad, tienen dificultades dada la capacidad de difusión del calor".

Así, "los síntomas graves son taquicardia, mareos, pérdida de conciencia". También se pueden complicar las enfermedades crónicas habituales de los pacientes.

Tercera edad

Por eso, son los ancianos los que más dificultad tienen, porque "toman muchas veces medicación y hace que la regulación de la temperatura que tenemos en el cuerpo esté afectada" o "porque tienen, en algunos casos, deterioro cognitivo, no se hidratan adecuadamente y no se protegen de forma adecuada".

Infancia

En el caso de los niños, "hay que tener especial cuidado para mantenerlos alejados del sol, además de las quemaduras y que tomen suficientes líquidos".