Cantaderas llenó la iglesia de "La Compañía" en la inauguración de Enclaves
Actuación de Cantaderas en la iglesia de La Compañía
Huesca
Este viernes arrancaba con una gran participación y calidad el Festival de Música y Patrimonio EnClaves que organiza la comarca de la Hoya. Las primeras protagonistas fueron las artistas de Cantaderas que interpretaron ante más e 230 personas su repertorio de música medieval y tradicional en el primer concierto de esta X edición. Esta formación ha conseguido con su actuación retrotraer al pasado a un público que prácticamente ha llenado la iglesia de San Vicente el Real de Huesca, y cuya emoción se ha visto potenciada por la sonoridad que ha aportado este enclave del Coso Alto de la capital oscense.
Durante el concierto se interpretaron piezas del entre otras, una pieza del siglo XIII yuxtapuesta a una melodía tradicional recogida en Monflorite y un villancico de Tierz, ambas integradas en el ‘Cancionero popular de la provincia de Huesca’ (1986) del fallecido en 2021 Juan José de Mur.
Después se ha desarrollado una primera parte del concierto en la que ha actuado Cantaderas con un repertorio que han anunciado en la actuación que recorrerá Francia y Suiza en los próximos meses y que se ha estrenado en La Compañía. Este programa musical conformado por canciones dedicadas a la Semana Santa, tanto tradicionales como históricas, que se conectan pese a tener hasta 700 años de distancia, fueron preparadas y perfeccionadas en el Museo Diocesano de la capital oscense en los ensayos entre obras y musas que se desarrollaron entre el martes y el jueves de esta semana.
En la segunda parte se han unido a ellas las mujeres de la Hoya que conformaron el taller ‘Dando voces’, que han actuado en solitario en algunas canciones, y también se ha incorporado el sonido de las panderetas y se han interpretado piezas de lugares distintos, como una rogativa de agua de la provincia de Soria.
El público se ha mostrado entregado y ha aplaudido con notable sonoridad todas las interpretaciones, que culminaron con una canción en la que artistas y público han cruzado la iglesia hasta la calle sin que se detuviese el espectáculo. Una vez allí la actuación ha continuado brevemente y a ella se ha unido la gente que paseaba por el Coso.




