Para la acusación particular, la sentencia del crimen de Broto es "conservadora"
El juez no ha tenido en cuenta el agravante de parentesco que solicitaba el abogado del asesinado, que elevaba la petición de cárcel a los 25 años
Huesca
El letrado de la acusación particular del crimen de Broto, Marcos Francoy, tilda la sentencia del juez de Huesca de "bastante conservadora", ya que entiende que no ha tenido en cuenta el agravante de parentesco que solicitaba y que elevaba su solicitud de pena a 25 años de cárcel. "Estoy pendiente de hablar con la familia y con ella decidiremos cuál es el siguiente paso a tomar", añadía Francoy, ya que tienen un plazo de diez días para recurrir la sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Huesca.
El magistrado tampoco ha aceptado la solicitud de 20 años de la Fiscalía y condena a la acusada de matar a cuchilladas a su expareja en Broto en febrero de 2020 a 17 años de cárcel. Entiende que en el juicio quedó probado que se trataba de un delito por asesinato en el que la víctima no tuvo posibilidad de defenderse. Rechaza, por otro lado, la versión de la acusada, que defendió en todo momento que "le enterró" el cuchillo a Geovanny Valencia en defensa propia, cuando él la amenazó primero con un cuchillo de cocina y le dijo, tras una fuerte discusión en su domicilio, que "era él o yo".
También declina los argumentos de la defensa, que trató de probar en todo momento que la procesada sufría malos tratos del asesinado y, como consecuencia de esto, sufría un trastorno mental que la habría llevado a cometer el crimen. El juez, sin embargo, niega que existiera el maltrato físico o que el tuviera una actitud “celosa” o “controladora” hacia ella. Señalaba el letrado de la acusación particular, en este sentido, que “se ha hecho justicia”, porque “nosotros siempre hemos defendido la verdad”, asegura.
