La estación de Canfranc, por primera vez engalanada y restaurada para recrear su inauguración

Canfranc

La Estación Internacional de Canfranc lucía este lunes engalanada con banderas de España y Francia para recrear su inauguración, el 18 de junio de 1828. Era la primera vez que ese acto se realizaba en el mismo lugar en el que el rey Alfonso XIII y el presidente de la República francesa de aquel año inauguraban la estación. Este año, en torno a 2000 personas, entre público y recreacionistas, se daban cita en el nuevo vial construido donde hasta hace un año se apeaba el tren.

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La ubicación no ha sido la única novedad. Este año se celebraba por primera vez con el título de Fiesta de Interés Turístico Regional, y en los discursos del alcalde de Canfranc y el consejero José Luis Soro se señalaban los avances en las obras del edificio, la explanada y en el objetivo de la reapertura de la línea internacional. “No debemos dejar de empujar”, decía el consejero Soro, para el que “el sueño de Canfranc ha avanzado más en siete años que en los últimos 50”. José Luis Soro no avanza plazos para la reapertura, y aunque reconoce que no será el 2025, señala los presupuestos y obras puestas en marcha por el Ministerio de Transportes y Adif, en el lado español, y la coordinación entre los gobiernos español y francés para volver a concurrir a las subvenciones europeas.

En cuanto a las obras de la explanada, “están prácticamente acabadas”, a la espera de que la eléctrica de el suministro eléctrico. El interior de la estación histórica continúa en obras y con la previsión de abrir el hotel a finales de este año.

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Cuatro golpes de calor durante la Recreación

Canfranc registraba una jornada extraordinariamente calurosa. Los servicios sanitarios de Cruz Roja han tenido que atender cuatro golpes de calor, tres de ellos a recreacionistas ataviados con trajes antiguos con varias capas. Los cuatro se han recuperado.

Menú histórico con chef de Estrella Michelín

Otra de las novedades de la VII Recreación histórica de la Inauguración de la Estación Internacional ha sido gastronómica. El chef con estrella Michelín Eduardo Salanova, que es canfranqués, era el encargado de adaptar el menú que tomaron los 300 comensales que asistieron a la inauguración en 1928. Seis platos que combinan delicatesen españolas y francesas de la época como salmón de Bidasoa, salsa tártara o huevos revueltos con trufa que han tomado los 150 comensales que se habían apuntado.