Alina Klochko: "En Aragón no hay que bajar al sótano a esconderse"
La guerra en Ucrania cumple este miércoles seis meses. Alina Klochko, presidenta de la Asociación Ucraniana de Residentes en Aragón ha valorado la situación.
Zaragoza
Seis meses de bombardeos, huidas y una guerra que todavía está latente. La batalla entre Rusia y Ucrania ha transformado la vida de millones de personas. En Aragón la solidaridad se ha multiplicado desde entonces. La recogida de alimentos o ropa se traslada hasta las fronteras y las iniciativas para facilitar la llegada de refugiados son todavía numerosas.
"Aragón es paz"
Más de 3.000 ucranianos han recibido ayuda en Aragón desde que comenzó la guerra. Se cumplen seis meses de la llegada de los primeros refugiados y todavía continúan llegando. También hay otros que se van. Eso sí, lo que encuentran en Aragón, coinciden, "es paz". Así lo ha asegurado Alina Klochko, presidenta de la Asociación Ucraniana de Residentes en Aragón.
Klochko también aseguraba que la situación todavía sigue siendo difícil. "Algunos no pueden acostumbrarse, otros están contentos... Pero en Aragón no hay sirenas. Ni hay que bajarse al sótano a esconderse. Además, muchos Ucranianos se sienten culpables porque han dejado lejos a sus esposos, o a sus hijos que son mayores de edad", explicaba.
La presidenta también ha recordado que es necesario que se siga apoyando la causa. La guerra todavía no ha terminado y parece estar lejos de hacerlo. "Seguimos recaudando material y alimentos.... Hay que ayudar mucho, en la medida de lo posible. Y aunque las ayudas llegan, el problema es que, de los que está aquí, algunos ya no tendrán donde volverse. Tampoco dinero para poder regresar a Ucrania", explicaban desde la Asociación de Residentes en Aragón.
El idioma, un problema
Muchos de los Ucranianos que han llegado a Aragón han intentado buscar trabajo. Y aunque algunos lo han conseguido, no todos lo han tenido fácil. La diferencia cultural y de idioma suponen un problema para que estas personas puedan comenzar un trabajo. Alina lo explicaba: "algunos si que trabajan pero el problema es el idioma".
Esta misma tarde, celebrarán un acto para conmemorar la independencia de su país, que cumple 31 años. Con él, quieren homenajear también lo vivido durante estos seis meses.