La hostelería de Huesca registró un 65% de ocupación en el mes de agosto

Monzón

El sector hostelero de Huesca presentaba este jueves en Monzón el balance de la temporada estival. Unos datos que se mantienen muy similares a los de las campañas de 2019 y 2021, pero que no han acabado de cumplir las previsiones iniciales. Durante este verano se ha recuperado definitivamente el turismo internacional, aunque la escasa rentabilidad producida por el aumento de los costes ha dejado una sensación agridulce en el sector.

En cuanto a la ocupación se mantiene, con una ligera bajada, la ocupación media respecto a los veranos de 2019 y 2021. El mes de agosto ha sido el mejor, con una ocupación media hotelera del 65%, destacando que en el entorno del Pirineo ha podido subir al 75-80% con llenos técnicos en días y momentos puntuales.

Según los datos, las pernoctaciones en nuestra provincia han descendido ligeramente en los meses de junio y agosto y se han mantenido en junio. El mes que más se registraron fue agosto, con 335.437 pernoctaciones.

Hay que destacar que se ha recuperado el mercado internacional, más allá del tradicional francés: turismo belga, holandés o alemán. De hecho, el turismo internacional representa el 21,5% del total, lo que supone una subida del 5,5% respecto del 2019.

En mercado nacional siguen fuertes las procedencias tradicionales: Aragón, Madrid, Cataluña y País Vasco. Aragón se consolida como la segunda CCAA más visitada en turismo de interior en España y con un liderazgo claro de la provincia de Huesca.

Cifras en el sector del turismo

El turismo continua siendo uno de los sectores económicos más potentes de la provincia, que genera miles de empleos directos e indirectos. Las plantillas medias han aumentado ligeramente respecto a años anteriores, con 15 trabajadores de media por alojamiento hotelero, 8-9 en los restaurantes y 7-8 en cafés, bares y ocio nocturno. Y además, el 73% de los empresarios han contratado personal extra en momentos puntuales de alta demanda.

Para el 30% de los establecimientos las cancelaciones han afectado “bastante o mucho” este verano (muchas derivadas de la obligada política de flexibilidad exigida por algunos portales o momentos).

La rentabilidad media hotelera, calculada por la tarifa media diaria, es ligeramente superior a la de 2021 y los ingresos medios por habitación disponible también. Sin embargo, este buen rendimiento económico se ve lastrado por los sobrecostes a los que los empresarios tienen que hacer frente, especialmente los gastos energéticos.

En cuanto a la rentabilidad de los restaurantes, cafés y bares, la mayoría de los establecimientos (55%) observa una reducción del ticket medio y acusan los sobrecostes energéticos y de materias primas.

Preocupaciones del sector

Actualmente el sector se muestra optimista pero con cautela. Hay que tener en cuenta que al incremento de los costes energéticos (las facturas de luz y gas han aumentado un 175% sobre el ciclo anterior) y de las materias primas, hay que sumar la devolución de los créditos ICO y tesorerías con tensiones en un sector que fue de los más afectados por la crisis del COVID 19.

Por ello desde el sector se demandan a corto plazo “bonos energéticos” aplicando ayudas COVID no ejecutadas para las empresas, planes de estímulo por las administraciones, rebajas de impuestos y costes regulatorios o eliminación de peajes y búsqueda de fórmulas de contratación adaptadas a la realidad de sector.