La Ribagorza profundiza en la historia de las explotaciones hidroeléctricas en el territorio
La Sala de Exposiciones ‘Casa Toni’ de Sopeira albergó la conferencia de Carles Barrull
Ribagorza
Casa Toni abrió sus puertas al ciclo de conferencias ‘Ribagorza, huellas en la piedra’. La nueva sala de exposiciones de Sopeira acogió un evento que supuso un acercamiento a la historia que provocó una transformación social, económica y paisajística en Ribagorza y recalcando, especialmente, la evolución de esta localidad del Noguera Ribagorza. El repaso a los orígenes y desarrollo de la Empresa Nacional Hidroeléctrica de Ribagorza (ENHER) sirvió a Carles Barrull, autor de la tercera charla de esta serie organizada por la Comarca de La Ribagorza, para poner en contexto el profundo cambio que supuso para los pueblos ribagorzanos la construcción de los embalses en sus valles a partir de 1946.
Como es habitual en este ciclo, fue el propio presidente comarcal, Marcel Iglesias, el encargado de presentar al conferenciante, en este caso, Carles Barrull. El historiador, nacido en Arén, fue descrito como “un gran conocedor de las circunstancias que promovieron la creación de la ENHER y su desarrollo, provocando importantes cambios en nuestros pueblos, de los que, seguramente, nuestros jóvenes no son conscientes “, por Marcel Iglesias.
A continuación, el historiador ribagorzano recordó que el año pasado se cumplieron 75 años de la creación de la ENHER, efeméride que ha sido contada en el último número de Ripacurtia, publicación editada por el Centro de Estudios Ribagorzanos, asociación de la que es fundador y secretario general.
Barrull inició su charla remontando al siglo XIX para desgranar una introducción de la regulación de los caudales pirenaicos, citando al ribagorzano Joaquín Costa, como precursor de unos planes “destinados a la construcción de canales en las zonas llanas, como el de Aragón y Cataluña, para alimentar las grandes extensiones de regadíos y otras obras públicas como centrales eléctricas desde la modificación de pequeños molinos” que se fueron transformando, con la llegada de inversión, en grandes presas como el embalse de Barasona en 1926 en la vertiente del Ésera.
Continuó centrando la mirada retrospectiva sobre la figura de Victoriano Muñoz Oms, impulsor de la ENHER, empresa pública que, dentro del duro contexto político y económico de los primeros años de la posguerra y la dictadura, estructura el desarrollo de los principales embalses de “la aventura del Noguera Ribagorzana”, entre las que se
encuentra Escales, ubicada en Sopeira. Esta construcción, y la consiguiente avenida de mano de obra, sobre todo de Andalucía, propulsa la construcción de colonias, con distintos equipamientos, para acoger esta nueva población. “Gracias a la ENHER, Sopeira creció notablemente, al revés que otros pueblos cercanos sin este recurso, que fueron perdiendo progresivamente habitantes”, indicó Carles Barrull, abriendo un interesante diálogo con el público que apuntó que el municipio llegó a tener “hasta seis bares y dos peluquerías”, según añadió José María Ariño, alcalde de la localidad.
Para finalizar, la conferencia abordó que estos cambios no fueron únicamente sociales, también paisajístico. A la inundación de los valles se unió “un mar verde”, en palabras de Carles Barrull, por un proyecto integral de reforestación.
El ciclo ‘Ribagorza, huellas en la piedra’ continuará el próximo jueves 15 de diciembre (19:00 horas), con un último capítulo que cerrará esa segunda edición en Benasque. El turno le llegará a la maestra, escritora y librera Felisa Ferraz, que compondrá una conferencia alrededor del Pirineo como escenario literario y presentará el proyecto Pirineo Literario. Este acto, bajo el título "Rutas, destinos y paisajes literarios en el Pirineo Sur" tendrá lugar en el Palacio de los Condes de Ribagorza.