La SD Huesca lame sus heridas tras el derbi

Huesca

Tras el duro palo recibido en La Romareda, los azulgrana realizaban una sesión de recuperación este lunes y guardan fiesta hasta el miércoles. Dos días de descanso que vendrán bien para despejar las cabezas y analizar la pobre imagen que dio el equipo en el derbi ante el Real Zaragoza donde se vio superado con facilidad desde el minuto uno. Un partido para olvidar y, aunque solamente son tres puntos, está claro que era el peor día y el peor escenario para que las cosas no salieran bien y se perdiera por el marcador más abultado de toda la temporada con los tres goles encajados.

Ziganda lo reconocía al final y el capitán Jorge Pulido, hablando de una derrota día y que el equipo no había estado a la altura. “Han sido justos vencedores, tragar, aguantarnos, pero es fútbol y pocas veces sucede lo que uno quiere en la vida y hoy el partido no ha sido como nosotros hemos querido y nos queda quedarnos con los 27 puntos que tenemos y no hemos podido sumar, ya lo sentimos”, decía Ziganda. Por su parte Jorge Pulido hablaba de “no hemos sabido estar a la altura y nos vamos dolidos”.

No queda otra que seguir trabajando, pero con una idea clara de que las SD Huesca tiene que cambiar lejos de su estadio. En casa ha sumado 21 puntos y fuera tan solo 6 con tres empates y una victoria y seis derrotas ya acumuladas.

Queda un partido para cerrar el año y la primera vuelta que se jugará el domingo que viene a las 18:30 horas. El objetivo de la semana es recuperarse bien y afrontar la visita a El Plantío con la ilusión de dar una alegría a la afición que está bastante desencantada con lo sucedido este sábado en Zaragoza.

Por delante cuatro entrenamientos para preparar el choque en el que volverá Juan Carlos tras cumplir sanción. No parece que Marc Mateu pueda llegar, pero veremos durante la semana como va su lesión en el sóleo. Los demás, estarán disponibles, salvo Lombardo que ha vuelto a tener una nueva recaída de su lesión y Nieto que todavía no puede jugar.