“Entrecabritos”, una apuesta personal que conecta con lo natural
"La cabra siempre tira al monte y aquí estamos las cabras y yo”. Con esta frase explica Marta Martín qué le hizo dejar su vida y su trabajo en la ciudad de Zaragoza y regresar al lugar en el que se crío
Marta Martín Entrecabritos 24/03/2023
16:09
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1679647125136/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Teruel
En el verano de 2020, una vez se abrieron las puertas tras la pandemia por la COVID 19, Marta Martín y Oscar, su pareja, se trasladaron a Torralba de los Sisones.
Ya fuese por la fuerza del instinto, del origen, o por el cansancio de meses de encierro, la realidad es que Marta decidió emprender y apostar por la naturaleza y la sostenibilidad. Quiso retomar el oficio al ya se habían dedicado sus bisabuelos. Desde entonces es pastora... o ganadera. "La cabra siempre tira al monte y aquí estamos las cabras y yo”, bromea Marta.
Los inicios no son fáciles. Como en otros negocios hubo que hacer inversiones importantes en equipos e instalaciones para poner en marcha la actividad. Con iguales dosis de ilusión y esfuerzo esta pareja creó “Entrecabritos” y las cabras volvieron a pastar en este pueblo de un centenar de vecinos.
El martes 28 Marta contará su experiencia en el Foro I + D Agro que organiza SER Teruel en la sede de Cereales Teruel y que será retrasmitido online .
Este encuentro que dará visibilidad al sector está patrocinado por la Diputación Provincial de Teruel, Fertinagro Biotech, Alimentos de Aragón, Naturuel , Caja Rural de Teruel, y Cámara de Comercio de Teruel.
Conservar la biodiversidad
Los animales que crían Marta y Oscar Paz están adaptados a la estepa de la comarca del Jiloca y son de dos razas en riesgo de extinción procedentes del norte de los Pirineos y de Guadalajara. Este ganado limpia los montes de esa zona del Noreste turolense. En ellos se alimentan y ayudan a los forestales. “Las cabras entran donde no pueden llegar ellos, colaboramos con los de esta zona, y ellos nos ayudan a nosotros”, explica Marta.
En Tornos, la localidad de al lado a la que acude el ganado en verano, estos pastores tienen 70 hectáreas de alfalfa y cereal exclusivamente para el consumo de sus cabritos. Así toda su dieta es ecológica, aun cuando escasean los pastos, y a pesar de que eso supone un esfuerzo extra y una menor producción para la explotación.
Mostrar el oficio para que se valore
Cuesta sin embargo que el consumidor reconozca y prime la calidad de este producto, el trabajo de los que lo crían, así como la labor social y medioambiental de la ganadería extensiva. A dar a conocer el oficio de pastor también dedica su tiempo Marta. Tiene muy claro que lo que no se conoce no se puede valorar. "Todos nos preocupamos por el taller al que llevamos el coche a reparar, pero no de dónde sale la comida que ponemos en el plato, y comemos cinco veces al día", comenta.
La vocación y el sacrificio de las profesiones de pescadores, agricultores o ganaderos agricultores debería de conocerse más. En muchos de estos trabajos “no hay ni sábados ni domingo, ni festivos nacionales, ni comuniones ni bodas”. Ella este mes de marzo ha visto nacer a 120 cabritillos, así que, como cuenta, “no me puedo ir a cualquier sitio en cualquier momento, tengo que darles de mamar”
Se hablara de la vocación y el sacrificio de las profesiones de pescadores, agricultores o ganaderos agricultores en I+D Agro Teruel / Cadena SER
Lamenta Marta que, hasta ahora, todo lo que ha venido del campo y del pueblo se ha menospreciado e infravalorado, de manera que quiere contribuir a cambiar esa imagen del sector mostrando su día a día en Torralba de los Sisones.
Experiencias y degustaciones
Entrecabritos ofrece la posibilidad de conocer in situ y de experimentar para conectar a las personas con el mundo primario. Son distintas las opciones a elegir bien conjuntamente o por separado. Muestran y guían por el entorno natural, comparten durante unas horas el oficio, y hacen degustaciones de su cabrito lechal. "Esto no es un parque de atracciones, enseñamos lo que hacemos todos los días, cómo es nuestra realidad con su cosas buenas y malas". Son más las buenas para esta enamorada del medio rural, a la que le gustaría que la sociedad fuese más consciente de cómo y dónde se producen los alimentos, para que puedan decidir con más información qué comer o qué no comer.
Pedidos ya cocinados
Llegar directamente a consumidor final era importante para esta pastora que diferencia además su producto con su historia personal. Es su marca. Trasmite autenticidad, entusiasmo y compromiso.
Entrecabritos ofrece la posibilidad de conocer in situ y de experimentar para conectar a las personas con el mundo primario. / Cadena SER
La venta online era una forma de diversificar. A ello se lanzó preparando esta carne cocinada a baja temperatura para llegar y calentar.
Acaba de sacar una opción para asar a la brasa. Se ha propuesto desestacionalizar el consumo de cabrito, que se circunscribe demasiado a Navidad. En su opinión es una carne castigada, a pesar de que es “muy sana, con menos grasa que el pollo, y fuente de hierro”.
Además de enviar los pedidos a particulares, grupos de amigos, o bares, su carne ya preparada se encuentra en la tienda de Jamones Domingo de Calamocha y en Carnes Atienza de Teruel. Piensa ya en producir una línea de patés. Y es que como dice esta mujer emprendedora que ha vuelto a sus orígenes, quienes producen alimentos en el medio rural “somos personas normales que hacemos cosas buenísimas”.
