Con las próximas licitaciones de Aínsa, Boltaña y Villanúa, el Plan de depuración de aguas llegará al 85% de su ejecución
Supone más de 100 depuradoras y una inversión de 104 millones

Lambán, junto al consejero Olona, la director del IAA o la alcaldesa de Sabiñánigo, en su visita a las obras de la nueva depuradora de Sabiñánigo Alto

Sabiñánigo
El Plan de depuración de aguas del Pirineo ha desarrollado el 85% de los 104 millones de euros con los que se inició. Son los datos que aportaba este lunes el presidente del Gobierno, Javier Lambán, que visitaba las obras de la depuradora de Sabiñánigo Alto, que dará servicio a sus 20 habitantes, y anunciaba la inminente licitación de las depuradoras de Aínsa, Boltaña y Villanúa.
Con ellas, todas las aglomeraciones de más de 2000 habitantes equivalentes en Aragón tendrán depuradora. Qedan pendientes siete pequeñas actuaciones que en su conjunto suponen 15,5 millones de euros. Por ello, las siguientes convocatorias del plan de depuración serán conjuntas y no en exclusiva para el Pirineo, explicaba el presidente. Para ello ha anunciado una nueva fase dotada con 38 millones más. El plan Pirineos se encuentra dentro del Plan general de depuración 2022-2027, de 142 millones, de los que 104 millones son depuradoras del Pirineo. El segundo programa será general para todo Aragón y las convocatorias pasarán de 400 a 1000 habitantes.
En los próximos meses entrarán en funcionamiento las depuradoras de Formigal-Sallent, Ansó, Torla y Canfranc- Estación. En verano, lo harán las de Benasque- Ancilles y continuarán las obras de Cerler, Candanchú y la aglomeración de Panticosa que incluye (Panticosa, Escarrilla, El Pueyo de Jaca, Sandinies y Tramacastilla de Tena).
El Presidente de Aragón, Javier Lambán, junto con el consejero de Agricultura, Ganadería y Medioambiente, Joaquín Olona, han visitado la depuradora de Sabiñánigo y han dado cuenta del estado del Plan Pirineos, que en total permitirá la puesta en marcha de más de 100 infraestructuras con una inversión total que supera los 100 millones de euros.
Sabiñánigo, que cuenta con depuradora hace muchos años, es la localidad aragonesa con más núcleos de población dependientes. Al calor del Plan Pirineos, los distintos barrios o núcleos se han presentado también a las convocatorias realizadas y la depuradora de Sabiñánigo Alto es una de ellas. Podría entrar en funcionamiento en el primer semestre de 2023, tras una inversión de 1,4 millones de euros, además de 500.000 euros para el colector de Tulivana.
Lambán se ha mostrado altamente satisfecho por el ritmo de ejecución del Plan Pirineos “que parecía imposible de cumplir entre los años 2019 y 2024, teniendo en cuenta, además, de dónde veníamos, con un plan judicializado, sobredimensionado y bloqueado”.
Cambio de modelo
En 2018, el Gobierno de Aragón desbloqueó el Plan Pirineos de Depuración paralizado durante 10 años. Con ello, explican desde el Ejecutivo, consiguió “reducir el gasto de la inversión a menos de la mitad y devolver a los municipios la autonomía local para poder decidir sobre su sistema de depuración.”
El anterior plan obligaba al Ejecutivo a la vinculación contractual con empresas concesionarias por valor de 358 millones de euros hasta 2030. Ese gasto se ha reducido a la mitad. Actualmente, se construye lo que se puede pagar con la recaudación del IMAR. De esta forma, no se hipoteca el pago de estas infraestructuras por las generaciones futuras durante 20 o más años.
En muchos casos se planteaban depuradoras sobredimensionadas. En el nuevo plan, se ha apostado por infraestructuras sostenibles, buscando lo más adecuado para cada lugar. Por eso, se dispone de distintos modelos y tecnologías: convencionales, extensivas, adaptando los criterios técnicos a la dimensión de los municipios, ya que la mayor parte de las actuaciones pendientes en materia de depuración se concentran en núcleos de pequeño tamaño.
La nueva orientación del plan Pirineos establece que las infraestructuras de mayor tamaño (superiores a 1000 habitantes equivalentes) sean ejecutadas directamente por el Instituto Aragonés del Agua y las de menos de 1000 habitantes equivalentes, por los municipios a través de un programa de subvenciones puesto en marcha por el Gobierno de Aragón.
La redimensión del nuevo plan permitió estudiar las verdaderas necesidades de los municipios más pequeños del Pirineo y aplicar tecnologías extensivas. Las depuradoras extensivas se denominan así porque requieren mayor extensión, mayor superficie. En estas instalaciones la depuración se efectúa con elementos naturales: filtros de arena, gravas y plantas.
Su capacidad de depuración de nutrientes es limitada y no absorben bien las puntas de caudal. También les afecta la meteorología. Como ventajas destacan los costes de explotación, con poco o ningún consumo energético. Son adecuadas para poblaciones pequeñas, de no más de 1000 habitantes equivalentes.

Cristina López Calvo
Redactora y locutora. Desde 2008 en la Cadena SER especializada en temas sanitarios y sociales para...




