Inteligencia Artificial en Aragón: avances en sarcopenia, vendimia, cáncer y piezas perfectas

Zaragoza

Un escritorio circular recibe al visitante en el Instituto Tecnológico de Aragón, un edificio gris con barandillas blancas cuya fachada da al aparcamiento del Campus Río Ebro de la Universidad de Zaragoza. Recibe a los micrófonos de A Vivir Aragón de Radio Zaragoza Rafael del Hoyo, responsable de la línea de investigación en Inteligencia Artificial y Big Data de este centro de investigación, que nos abre las puertas de la Sala Faraday, el laboratorio de inteligencia artificial.

Reúne "para las empresas, un "conjunto de demos y ejemplos, donde enseñamos lo que cocreamos con las empresas e ideas para proyectos". Allí, por ejemplo, está Pilar, "nuestra asistente virtual".

Y vamos hacia la existencia de "fábricas en la nube, virtuales, que van a ser gemelos digitales de las cosas que se hacen" porque "en digital lo puedes cambiar, borrar, mover y optimizar". Así, "lo puedes probar todo el virtual y ponerlo después en la parte real".

Salimos a un espacio mucho más amplio. Es viernes, y algunos de sus investigadores están teletrabajando. Reina el silencio con el murmullo de los teclados. Entre mamparas, cada investigador lleva entre manos proyectos sobre Inteligencia Artificial con distintos destinos.

Irene López investiga la sarcopenia, es decir, la pérdida de masa, fuerza y funcionamiento de los músculos en los mayores. Y Rocío Aznar se centra en el cáncer del colon y próstata y en la búsqueda de tratamientos especializados. En una mesa cercana, Beatriz Franco aborda la generación del lenguaje y en la de al lado, José Ignacio Calvo, entre dos pantallas de datos, monitoriza la vendimia de la Denominación de Origen de Cariñena. Y del sector primario a las fábricas. Ricardo Salillas relaciona la Inteligencia Artificial con la producción industrial.

Les dejamos concentrados entre pantallas, trabajando en lo que, en un futuro más o menos cercano, serán tratamientos médicos personalizados, mejoras en la industria y en la agricultura. Salimos del Instituto Tecnológico de Aragón. Por el pasillo, nos despiden dos de los pingüinos de la Expo, que tienen aquí su casa.