La resaca del derbi deja un Huesca feliz y graves insultos a Pulido que no pueden quedar impunes
Los azulgranas no salen del descenso tras completarse la jornada, pero son optimistas tras la dinámica positiva que lleva el equipo
Jorge Pulido en Carrusel Deportivo Huesca
Huesca
Tras sumar 8 puntos de los últimos 12 posibles, la SD Huesca ya presenta otra cara. Es verdad que no le permite todavía salir de la zona de descenso, pero está claro que la imagen y las expectativas son muy distintas a las que había hace pocas semanas. Ante el Espanyol y el Zaragoza, especialmente, pero antes con el Amorebieta y Albacete, los azulgranas se muestran un equipo muy solido con un gol tan solo encajado, y de penalti, y una mayor efectividad de cara a la portería rival.
Son datos para ser más optimistas, pero con los pies en el suelo porque todavía queda mucho camino que recorrer para llegar a los 50 puntos, contando que la SD Huesca solo ha sido capaz de sumar 16 en 16 jornadas.
Ahora mismo el Huesca está en el puesto 19 y por delante tiene al Andorra y Villareal B con 17 puntos, uno más, Albacete con 18 y Mirandés con 19. El objetivo es dar el “sorpasso” lo antes posible ir ampliando la suma de puntos.
La victoria en La Romareda fue incontestable y merecida para un Huesca que vencía por segunda vez, en este caso con público, al Real Zaragoza en su estadio. Del gol de Galán se ha pasado a los de Obeng y Nieto que hicieron estallar de alegría a los aficionados desplazados a la capital aragonesa y los que lo siguieron desde Huesca.
La nota positiva fue el triunfo y la negativa el comportamiento de los seguidores zaragocistas que durante varias fases del choque gritaron “Pulido muérete”. Una situación denunciable y que no puede quedar impune porque no es la primera vez, fue reiterativo y los cánticos fueron de muchos aficionados locales.
Jorge Pulido habló al final del choque y por la noche en el Carrusel Deportivo de la Cadena SER y lamentó ese comportamiento hacia él e incluso desvelo que había pedido a su familia que no acudieran a La Romareda porque sabía que era algo que podía suceder, como así fue.
El capitán hizo un gran partido y no entró en rencillas y polémicas, pero dejó claro que hay que erradicar ese comportamiento de los estadios de fútbol y que se habla mucho de racismo, pero también hay que condenar y castigar todo tipo de insultos a los deportistas que saltan a un terreno de juego.
Pulido también hablo del choque e hizo hincapié en es apoyo de la afición y que el Huesca había “merecido la victoria. Creo que, este último mes, se ve un Huesca diferente, con las cabezas liberadas y, ahora, se ve que disfrutamos dentro del campo”.
Una victoria que dedicaba a la afición azulgrana. “Después del palo del año pasado, teníamos ganas de revertir la situación y hemos sido capaces de dar una alegría a nuestra gente. Quiero darles las gracias porque se ha notado mucho su apoyo”.
Y añadía, “me quedo con la afición de Huesca y de la provincia, donde me siento muy querido y, regalarles la victoria de hoy, es lo más importante”. También indicaba que hay que “seguir trabajando y tener calma, no hemos hecho nada a día de hoy, seguimos en una situación complicada, así que calma y paciencia”, comenta.
El viernes hay “otra prueba importante en casa, y ojalá veamos El Alcoraz del día del Espanyol, es la única forma de levantar esto”, concluía.