Té, una estufa y buena conversación: así se sobrelleva la huelga de hambre para apoyar desde Aragón a Palestina

Zaragoza

No ha habido cena de Nochebuena o comida de Navidad para Maribel Roldán y José Luis Martínez. Solo té, una estufa y la conversación con los que hacen parada en la sede de la Casa Palestina de Zaragoza. Así sobrellevan estos activistas la huelga de hambre que iniciaron el día de Nochebuena para solidarizarse con las víctimas del conflicto en Gaza entre Israel y la organización terrorista Hamas. "A base de tés lo llevamos bien", cuenta Roldán, mientras Martínez calcula que ya "he perdido unos dos kilos. Se me nota en la cara".

Son algunos de los miembros de Ecologistas en Acción que han iniciado esta forma de protesta junto a la Casa Palestina en Aragón. El objetivo es llegar en ayunas a Fin de Año. Y no es coincidencia que esta protesta se haga durante estas fechas: "Nos resultaba difícil pasar la Navidad de forma serena mientras siguen muriendo bajo las bombas y el hambre niños y otras víctimas en Palestina", explica Martínez.

No hay posibilidad de apoyar a los damnificados del conflicto de otra manera. Así que estas fechas las viven con impotencia y "con muchísimo estrés y dolor, porque además ayer se cumplieron los 80 días de guerra. Se les ve muy tristes", señala Maribel Roldán tras preguntarles qué mensajes les llegan de los palestinos que están sufriendo de primera mano este enfrentamiento.

De vuelta a Zaragoza, cada vez son más los que se está sumando a esta huelga de hambre. Hoy mismo la iniciarán tres jóvenes palestinas. Además, el próximo sábado han convocado una manifestación que partirá de la plaza Huesca, en el barrio de las Delicias.