Al igual que ocurriera en la tarde-noche del viernes, con protestas de agricultores del Alto Gállego y la Jacetania, que salieron a las carreteras para protestar con sus tractores por la crítica situación que está atravesando la agricultura, estas marchas se han vuelto a repetir en la tarde de este domingo, en varias carreteras de la provincia. Algunas de ellas habrían provocado importantes retenciones de tráfico: de hasta dos kilómetros en la N-330 a la altura de Sabiñánigo donde se han concentrado una veintena de tractores. También en Jaca, y en Puente la Reina y Villarreal de la Canal. Otras fuentes también hablaban de más retenciones carreteras en Jaca, en dirección hacia Pamplona. Zonas como el Somontano, Sobrarbe y Ribagorza tampoco se han librado, ya que la N-123 de Barbastro hacia Graus, la A-139 y la N-260 entre Campo y Aínsa también han sufrido durante la tarde paradas de tráfico debido el gran número de tractores que han salido a la carretera. La Delegación del Gobierno en Aragón ha indicado que estas marchas de tractores registradas en la tarde de este domingo no habían sido comunicadas previamente. En el momento en el que se ha tenido conocimiento de las mismas, la Guardia Civil ha actuado para controlar el tráfico y preservar la seguridad. Finalmente habrían llegado a ser 359 los tractores que se han movilizado en las diferentes columnas repartidas por las carreteras de la provincia de Huesca. Precisamente este lunes, en Zaragoza, hay prevista una rueda de prensa para dar a conocer las acciones de protesta que las organizaciones agrarias de Aragón, ARAGA, ASAJA, UAGA y UPA, han acordado convocar para los días 8, 13 y 22 de febrero. Los agricultores aseguran que los motivos para llevar a cabo las protestas «que vienen de largo» con una PAC con «más compromisos que exigencias» como explica Andrés un agricultor de la Canal de Berdún. Desde este sector en los valles del Pirineo, recuerdan que uno de los puntos fundamentales es «el hartazgo de todos», la Unión Europea - aseguran- exige cánones de producción con una calidad para luego comprar cereal o ganadería de otros países a los que, asegura, «no se les exigen las mismas medidas sanitarias y acaba siendo una competencia desleal »porque este negocio ya está debilitado desde hace tiempo añade. La bonificación del gasóleo ante la subida de los carburantes, la exportaciones de productos que no cumplen la misma calidad que los españoles, son algunos de los nubarrones que ven el el horizonte. Pero no solo estos porque Andrés se refiere a todas las leyes que protegen espacios, cauces de ríos «cada vez nos están exprimiendo más». Pero «hay mucho más» es la vida de los pueblos de los montes porque «todo gira entorno a este sector» además de poner en valor también el turismo al que, reconoce, «molestaron» con la tractorada cuando llegaban a pasar el fin de semana los visitantes pero, es la única forma de dar visibilidad