Día del Implante Coclear: "Volví a escuchar los pájaros en la calle, las hojas del viento. Sonidos que tenía perdidos"

Zaragoza

¿Cómo es la vida sin sonido? ¿O volver a escuchar después de mucho tiempo? Se lo hemos preguntado a los que llevan un implante coclear, ya que hoy se celebra su día. En Aragón, la unidad de referencia, ubicada en el Hospital Clínico de Zaragoza, ha realizado 760 intervenciones desde que se creó en 1995.

Entre ellas, a la pequeña Nerea, de 9 años. Le pusieron un implante coclear recién nacida, con un año. En los micrófonos de Hoy por Hoy, de Radio Zaragoza, explicaba que "llevar implantes, para mí, ha supuesto poder escuchar, aprender a leer y a comunicarme con amigos y familiares. Me gusta mucho escuchar música y tocar el ukelele. Y aunque he pasado malos ratos en el hospital, ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida".

José Luis fue operado por primera vez en mayo de 2005. Hasta entonces, solo tenía un 50% de audición. Con el implante coclear, volvió a escuchar sonidos de los que no se acordaba. "Le preguntaba a mi mujer, ¿esto es el sonido de la lavadora? Volví a escuchar también los pájaros en la calle, las hojas del viento, arrugar una bolsa... Todos esos sonidos los había perdido. Volver a escucharlos es una sensación muy agradable", explicaba desde la Asociación de Implantados Cocleares de Aragón.

Agradable para los que vuelven a escuchar, pero también para los profesionales que les operan, que suelen ser los primeros en vivir la primera escucha. A algunos les caen lágrimas de alegría. A otros, de miedo, "como a los niños, que suelen llorar porque se asustan", que explicaba la otorrina Raquel Artal trabaja en la Unidad de Implante Coclear del Hospital Clínico. "Pero los papás, de repente, al ver que su hijo se mueve y responde a sus estímulos es super emocionante. Unos lloran de susto y los padres, de emoción", contaba Artal.