"El recrecimiento de Yesa no se terminará en esta legislatura, ni en la siguiente, ni nunca"

El recrecimiento de Yesa es " imposible y antes o después se habrá de reconocer" es lo que aseguran desde la Asociación Río Aragón , que tras más de 20 años en la lucha contra esta ampliación, aseguran que "anunciar que faltan tantos años para terminar el recrecimiento como cuando se puso la primera piedra, es reconocer que esta obra se ha apartado de toda lógica", aludiendo a las declaraciones del presidente de la CHE Carlos Arrazola en la CADENA SER de Aragón donde recordaba que antes de 2027 no estarían acabadas estas obras.

"Exigimos valentía y honestidad políticas- añaden- para reconocer el fracaso del recrecimiento de Yesa, explicar que su renuncia no es ninguna catástrofe y abordar las necesidades reales con alternativas socialmente más justas y medioambientalmente sostenibles" . Explican desde la Asociación que "el recrecimiento de Yesa no se terminará en esta legislatura, ni en la siguiente, ni nunca" al menos en los términos que fue concebido en el pasado siglo basado en una gestión del agua de 'más de cien años".

Egoísmo y despilfarro

Insisten en el 'egoísmo' de responsables políticos y de Bardenas que " confunden sus deseos e intereses particulares con realidades e intereses generales" . Recuerdan que hace casi un año se paralizaron los trabajos de recrecimiento y que -ahora- asisten al anuncio de un nuevo plazo de finalización, que - indican- "pone el contador en la misma posición en que se hallaba cuando en mayo del 2001 se puso la primera piedra."

Hablan de un "despilfarro que ya lleva consumidos más de 400 millones de euros cuadruplicando el presupuesto de adjudicación que, recordemos, fue de 113 millones".

René Petit

En el comunicado emitido explican que " Después de 23 años, prometen el recrecimiento de Yesa con el mismo horizonte que entonces. Pero, de verdad, ¿qué pasa en Yesa? En Yesa pasa que, ya en 1983, su constructor René Petit dijo "La ampliación de Yesa me daría mucho miedo" En Yesa pasa que, cuando se estaba redactando el actualmente en vigor modificado nº 3, desde la Subdirección General de Infraestructuras y Tecnología se señaló “A modo de resumen, entiendo que la tipología de recrecimiento adoptada conlleva la asunción de riesgos innecesarios, y en absoluto despreciables, asociados a incertidumbres no resueltas”.

Advertencias ignoradas por la CHE y respondidas por el máximo responsable de la obra en aquellos momentos, Sr. Raimundo Lafuente Dios, desde la más absoluta prepotencia y falta de argumentos. En Yesa pasa que, el informe encargado al Colegio de Ingenieros de Caminos Canales y Puertos, que había de dar las definitivas garantías de seguridad, fue escondido más de un año desde su entrega y tan sólo se atrevió a decir en sus conclusiones “Creemos que, prestando atención a las recomendaciones de estos dictámenes y a los asesores especializados de la CHE, la ladera tiene estabilidad suficiente”.

Se siguen moviendo

Algo que tiene mucho de opinión y poco de evaluación científica rigurosa, para algo tan serio. En Yesa pasa que, tras innumerables actuaciones y declaraciones asegurando la estabilidad definitiva, las laderas de Yesa se siguen moviendo y a fecha de hoy, el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea Copernicus confirma al 100% que las laderas de Yesa se mueven y se están triturando. En Yesa pasa que, cuando se habla con cualquier persona honesta que ha trabajado en las obras de recrecimiento de Yesa, confirman, a pie de obra, que cada solución dada ha sido un fracaso y que la solución definitiva no existe. Solo la soberbia ingenieril, con coste cero para sus fracasos, y una ceguera política que, ignorando la crisis climática, vive de mitos del siglo pasado, pueden explicar estas proclamas de huida hacia adelante.