"El ruido lo hacen los políticos, pero los ciudadanos son quienes votan a los que lo generan, la ultraderecha"
El politólogo aragonés, Víctor Lapuente, pide en La Rebotica una reflexión profunda a la sociedad para acabar con el individualismo extremo de la política

Víctor Lapuente ha pasado por La Rebotica de Radio Zaragoza (26/03/2024)
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Zaragoza
El ruido que se ha instalado en la política aragonesa es “el pan nuestro de cada día de la ultraderecha y no solo en la comunidad, sino en toda Europa”, asegura el experto aragonés en Ciencias Políticas, Víctor Lapuente. Una furia, añade, que irá a más con la llegada de la precampaña de las elecciones europeas. La foto, pese a los miles de kilómetros de distancia, se repite. Hace unos meses un inmigrante iraquí quemó un Corán delante de una mezquita en Estocolmo. Aquí, a las puertas del palacio de la Aljafería, Alejandro Nolasco, líder de VOX en Aragón, rompió un folleto del Ayuntamiento de Huesca sobre el ramadán. “Es la misma dinámica en las dos situaciones. Es el ruido de la extrema derecha”, apunta Lapuente.
Al mismo tiempo, asegura, el PP se enfrenta a dos dilemas: meter a VOX en los gobiernos o dejarlos fuera, aunque esto pueda suponer que los ultras los adelanten electoralmente. Con todo, Lapuente lo tiene claro, funciona mejor la táctica que ha elegido el presidente de Aragón, el popular Jorge Azcón, la de meter a VOX en el ejecutivo. De esta forma, insiste “cuando un partido ultra entra como socio minoritario en un gobierno, la ciudadanía detecta que las políticas no se les dan bien y eso les pasa factura electoralmente. Pueden perder hasta una representación por encima del 5 y el 10%”. Eso sí, esta fórmula es arriesgada porque tiene unos costes y el precio es alto: el ruido y la desafección.
En relación con la desafección política, el ejemplo más claro está en España y en Francia. Ahora mismo ha caído la confianza de las ciudadanías en sus políticos y estos dos países lo están sufriendo más. “Las declaraciones de la ultraderecha, deslegitimando el sistema político o del propio PP haciendo lo mismo con el gobierno español tiene un coste mayor que en otros lugares. En otros países la confianza institucional se recupera cuando la economía coge músculo, pero aquí la economía está funcionando muy bien y la confianza sigue muy baja, por debajo de las cifras prepandemia”, ha apuntado en La Rebotica. Por eso, ha pedido una reflexión profunda a la sociedad para acabar con el individualismo político instalado ahora mismo en Europa.




