Tres mujeres, tres caras del empleo en Aragón

Zaragoza

Son Silvia, de Calatayud y de 55 años; Carmen, de Tauste y a punto de cumplir los 25; y Silvia de 49, vecina de Zaragoza. Las tres han contado su situación laboral en los micrófonos de la Cadena Ser. Trabajan con contratos a media jornada que nos les permiten vivir o emanciparse y por eso tienen que encadenar distintos empleos estirando su día casi hasta el infinito.

En otros casos, después de años en el sector comercial, un ERE en plena pandemia de coronavirus se llevó su plaza. Desde entonces encadena contratos indefinidos. Nunca han llegado a serlo ya que la despedían después de los pertinentes meses de prueba. Puede sacar adelante su vida gracias al sueldo de su pareja.

En otro ejemplo la edad es el problema: siempre hay alguien más joven a quien elige el empresario, lo que desata el enfado. "Si hay ganas de trabajar y se cumplen los requisitos, qué importan los años", se pregunta.