Los Obispos de Aragón envían un mensaje de apoyo al mundo rural con motivo de San Isidro Labrador

Barbastro

Los Obispos de Aragón con motivo de la festividad de San Isidro Labrador, patrón de los agricultores, trasladan un mensaje de solidaridad y apoyo a los hombres y mujeres del campo. Lo hacen con la carta conjunta, “Desafíos y esperanzas en el mundo rural”.

Los cinco prelados aragoneses abordan en la misiva las protestas de las últimas semanas, al mismo tiempo que destacan que los pueblos aportan una “vida mas humanizada y saludable que favorece el desarrollo de la espiritualidad y de la religiosidad” y afirman que “la agricultura y la ganadería del siglo XXI han de producir suficientes alimentos de calidad para una población mundial”.

Los obispos destacan en la misiva las serias dificultades que tienen que afrontar los habitantes del mundo rural, “estos problemas son las altas inversiones en maquinaria e infraestructuras agrícolas y ganaderas, las dificultades para acceder a las ayudas de la Unión Europea y la competencia desigual con grandes grupos de inversión, entre otros”.

Los prelados recuerdan algunos de los valores del mundo rural, “un estilo de vida menos estresante, solidaridad entre vecinos, contacto con la naturaleza y una vida auténtica y saludable”.

La carta de los obispos insta a “afrontar el reto de la despoblación con decisión, mediante políticas eficaces y promoviendo, al mismo tiempo, el aprecio del estilo de vida rural frente a la cultura dominante que sobrevalora la vida urbana”. Finalizan la carta mostrando su apoyo y oración a los habitantes del mundo rural.

La carta está firmada por Carlos Escribano Subías, Arzobispo de Zaragoza; Vicente Jiménez Zamora, Arzobispo Emérito de Zaragoza y Administrador Apostólico de Huesca y de Jaca; Ángel-Javier Pérez Pueyo, Obispo de Barbastro-Monzón; José-Antonio Satué Huerto, Obispo de Teruel y Albarracín; y Vicente Rebollo Mozos, Obispo de Tarazona.