Oficios en peligro de extinción

Zaragoza

¿Se te ha roto la plancha y ni te planteas arreglarla?, ¿qué pasó con el reloj del abuelo que dejó de funcionar? ¿sabes dónde afilar los cuchillos? ¿se te ha roto un cristal en casa? Tareas rutinarias y oficios que se están quedando sin relevo.

Satur, es relojero, pero lleva jubilado más de 20 años. Aún así guarda toda su herramienta que pone a disposición de quien quiera aprender porque es consciente de que ya quedan pocos, y es difícil encontrarlos.

Pero tampoco hay demasiados cristaleros. Santiago tiene 33 años, y es de los pocos jóvenes que hay en la profesión. Otra profesión que peligra es el de Ana: es zapatera y lleva toda la vida dedicándose a esto. Aprendió el oficio de su padre, que tenía un local en la calle Rufas. Tanto ella como su hermana decidieron seguir sus pasos y especializarse no sólo en los zapatos. Hoy apenas hay 60 negocios de este tipo en todo Aragón.

Las casas de reparación de electrodomésticos también escasean en estos tiempos. Antes era habitual ver estos espacios en la calle aunque ahora cuesta encontrarlos a pesar de que están muy cotizados.