Al ritmo de la Marcha de los Reyes de Aragón y flanqueada por el presidente de la comunidad, Jorge Azcón, y la Ministra de Defensa, Margarita Robles, Leonor de Borbón entraba en La Seo de Zaragoza donde ha sido distinguida con la Medalla de Aragón y donde ha pronunciado sus primera palabras. Su Alteza Real, a la que apenas le quedan cinco semanas para concluir su formación en la Academia General Militar, ha mostrado su agradecimiento por el afecto recibido a lo largo de la mañana que ha calificado de «emocionante». En su discurso ha recordado la expectación con la que llegó a Zaragoza el pasado 17 de agosto, después de todo lo que le había contado su padre, que también pasó a mediados de los 80 por la capital aragonesa para recibir formación militar. «Llego con ilusión y ganas de aprender» , ha afirmado. Lo que ha vivido, asegura, supera con creces lo que esperaba. «Me he sentido en casa, acogida y acompañada en una tierra que siempre formará parte de mi vida »., continuaba. «a empiezo a echaros de menos», ha añadido en su discurso. Ha tenido palabras para sus compañeros de promoción, jóvenes de su generación a los que siente unidad para siempre, ha afirmado. La Princesa de Asturias ha dado las gracias por el respeto y la amabilidad de los aragoneses que asegura sentir en un día tan especial y en las distinciones que hoy recibido. De nuevo ha recordado que su padre, Felipe VI, lo vivió de modo parecido y explicaba que en los últimos días han hablado mucho de ello. Leonor de Borbón ha concluido su alocución diciendo « Gracias Zaragoza, gracias Aragón . Gracias a todos los que habeéis hecho posible que en este tiempo me haya sentido una aragonesa más, una mañana más».