La SD Huesca mira la luz al final del túnel con empresarios instalados en la provincia

Huesca

Una vez conseguida la permanencia en el plano deportivo, y a la espera de que finalice la temporada, con el último encuentro ante el Levante de este domingo a las 16.15 horas, la SD Huesca está inmersa en otra pelea que es la de conseguir dar estabilidad económica e institucional al club. Todo pasa por la entrada de capital y está previsto que en breve pueda haber buenas noticias en este sentido.

La Fundación Alcoraz lleva varios meses trabajando en conseguir una ampliación de capital que va por buen camino y que desembocará en la venta de la mayoría de sus acciones. Los grupos Costa y Pini son las dos empresas que entrarían con fuerza para tomar las riendas de la sociedad.

Salvado lo más importante hasta el momento, el escollo deportivo, el trabajo en los despachos sigue con gran intensidad ya que urge una solución debido a la delicada situación económica que obliga a tomar decisiones de calado en la entidad.

Desde la Fundación Alcoraz transmiten buenas vibraciones y el hecho que puedan ser empresas arraigadas en el territorio ha caído bien en una afición que está pidiendo desde hace mucho tiempo un cambio radical en el club que ha ido en caída libre desde hace tres temporadas.

Además, se está cambiando el organigrama directivo y el consejo de administración ha sido renovado casi en su totalidad. Solamente queda la figura del presidente Fernando Callizo y que parece no por mucho tiempo más.

Nuevos gestores y nuevos tiempos que todo el mundo está esperando impaciente porque la SD Huesca necesita músculo económico y otro tipo de gestión si quiere pelear con garantías en la Segunda División y mantenerse en el fútbol profesional donde lleva 15 temporadas.

Este año le ha visto las orejas al lobo y toca aprender de los errores. El objetivo es que el club pueda formar un equipo que ilusione a la afición y caminar así, de nuevo, de la mano para volver a entusiasmar a una ciudad y a una provincia que ha seguido demostrando que una vez más se ha agarrado el lema de "Fieles siempre sin reblar".