El Fondo Sur de La Romareda dice adiós cargado de nostalgia y recuerdos

Zaragoza

La despedida del domingo en La Romareda será diferente, no tendrá nada que ver con la de una temporada cualquiera, y en especial para los abonados del Fondo Sur. Al margen de lo que supone siempre la última fecha del calendario, habitual día de plebiscitos, que los habrá por parte de la afición porque la temporada se las trae, significará el último día del Fondo Sur en un partido del Real Zaragoza. Todavía estará en pie en el último gran acto que albergará La Romareda, tal y como la hemos conocido, el concierto de Bunbury del próximo 6 de julio.

Será a partir del día 8 cuando se derriben el antiguo Edificio de Urbanismo, El Cubo, que últimamente fue la sede de la Cámara de Cuentas, y finalmente, en esta primera fase de obras, el Fondo Sur. Hemos dialogado con varios abonados (Javi, Sergio, Aurelio, Quique, Julio y Luis) que llevan toda una vida en las localidades de esta zona del estadio. Nostalgia, recuerdos, y preocupación por conocer donde podrán ver el fútbol la próxima temporada. Pero también sentimiento encontrados. Por otro lado, felicidad por saber que el campo nuevo será una realidad. La mayoría lo vivirán el próximo domingo con nostalgia por el adiós a un lugar desde donde han visto al Real Zaragoza durante décadas.

Han sido muchos años en un lugar donde se han hecho amistades, se ha encontrado pareja, o se ha vivido el fútbol en familia. Por encima de todo, esos muchos recuerdos futbolísticos vividos en la llamada durante años y años, la portería de Jerusalén. No solo eso, si no que el Fondo Sur fue la primera localidad de la mayoría de los zaragocistas que empezaron a ir a La Romareda en los 70 y hasta finales de los 80. Allí se ubicaban, en las dos cuñas laterales. las localidades infantiles, las míticas puertas 9 y 14.

Además de la nostalgia, la tristeza y por otro lado la satisfacción de saber que todo esto les va a valer la pena porque es el inicio de un nuevo estadio, tan demandado por los zaragocistas, existe la preocupación de dónde podrán ver a partir de la próxima temporada a su Real Zaragoza. Su grada, sus localidades, ya no estarán. Todos esperan con impaciencia qué planes tiene el club para la reubicación de todos estos abonados.