El cáncer o el linfedema: enfermedades que se agravan con el calor

Zaragoza

Las altas temperaturas afectan a la población general, pero especialmente a las personas que padecen enfermedades, ya sean crónicas o no. El cáncer y el lipedema son algunos ejemplos de afecciones que empeoran en la época estival. Hidratarse, ingerir yogur y evitar la exposición directa al sol son algunas de las recomendaciones que da la oncóloga radioterápica y miembro del Comité Técnico de la Asociación Española Contra el Cáncer en Zaragoza, Reyes Ibáñez: "Muchos pacientes están sometidos a fármacos sistémicos que pueden tener reacciones de fotosensibilidad o de fotoalergias, por lo tanto, hay que evitar la exposición directa al la irradiación solar, y lo mismo ocurre en los pacientes sometidos a radioterapia; para ello hay que tapar las zonas que van a ser irradiadas siempre con tejidos naturales que permitan la transpiración".

El calor, al ser vasodilatador, afecta de manera DIRECTA y de forma negativa a patologías crónicas como el linfedema o el lipodema. Son enfermedades que ya de por sí provocan inflamación. Pero ¿En qué se diferencian? Belén Miró es trabajadora social en la Asociación de Personas con Linfedema y Lipedema en Aragón: "El linfedema se produce por un mal funcionamiento del sistema linfático y lo que provoca es una acumulación de linfa y una inflamación que se puede dar en cualquier parte del cuerpo, lo más común es que sea en las extremidades. El lipedema comparte con el linfedema el aumento de volumen, pero se da exclusivamente en mujeres de caderas hasta el tobillo y se trata de una inflamación de la grasa", informa Miró.

Por ello, las recomendaciones para el verano son mantener los drenajes linfáticos manuales y, en la medida de lo posible, que el sol no incida directamente en el miembro afectado. "Caminar dentro del agua, nadar o hacer aquagym son ejercicios que son muy recomendables, también el calor juega un poco en contra a la hora de llevar prendas de compresión ya que es una parte importante del tratamiento tanto para el linfedema como para el lipedema (los pacientes suelen llevar mangas o medias de compresión) y sabemos que estos días es un poco complicado el ponerlos, pero la verdad es que es importante que sigan llevando estas medias de compresión. Además se recomienda dormir con la zona afectada, por ejemplo las piernas, un poquito elevada", recomienda la trabajadora social de ADPLA.

Se calcula que, en el caso de linfedema, cerca de 25.000 aragoneses lo sufren aunque existe un infradiagnóstico. En cualquier caso, el calor es un agravante para aquellas personas enfermas que son más vulnerables.