Avances de las obras en las autovías de acceso al Pirineo

Estos días hablamos mucho de carreteras, desplazamientos,.. por eso nos preguntamos... ¿Cómo avanzan las obras de renovación prevista en uno de los destinos turísticos por excelencia en Aragón, en la provincia de Huesca? Hay tres autovías por terminar, las de acceso al Pirineo.

Las obras de construcción del tramo Tiermas-Sigüés de la A-21, la Autovía del Pirineo Pamplona-Jaca, sufrirá un nuevo retraso y no se pondrá en marcha este verano 2024 como se anunció en su día. Así lo ha confirmaba el Ministerio de Transportes con el ministro Oscar Puente a la presidenta de Navarra en su reciente encuentro. Un retraso que ya había sido anunciado en su momento y que se ha vuelto a ratificar, si bien meses atrás se informaba que el grado de ejecución superaba el 80%, ahora señala que los trabajos en este tramo, en marcha desde 2018, “se prevé que concluyan a lo largo de 2025 siempre que los condicionantes de una obra de estas características lo permitan” según recogen tanto Diario de Navarra como Diario de Noticias-Navarra.

Este tramo de autovía, de 6,6 km, evitará a futuro circular por la antigua nacional N-240 en un tramo sinuoso en la zona del embalse de Yesa. Es uno de los 3 tramos pendientes de esta autovía en Aragón, donde la competencia constructiva es del Gobierno Central. El desdoblamiento de estos 6,6 km que discurre en su totalidad por la provincia de Zaragoza fue adjudicado en junio de 2018 a Vías y Construcciones por 51 millones de euros y un plazo de 36 meses, por lo que debería haberse entregado en junio de 2021. Pero en este tiempo se han aprobado dos modificados que han elevado el precio final hasta los 68 millones y que también alargaron el plazo hasta los 76 meses, es decir, hasta julio de 2024 que ahora tampoco se cumple.

TRAMOS PENDIENTES, A REVISIÓN

En la autovía A-21 entre Jaca y Pamplona hay 73 kilómetros abiertos. Además de Sigüés-Tiermas, hay otro tramo aún más retrasado entre Fago y Puente La Reina (11,6 km y 85 millones de coste estimado). Otro tramos, la variante de Jaca, de 8 km, que servirá además como futuro enlace entre la A-21 y la A-23 sigue sin avances y con una fuerte oposición de varios colectivos. Sobre ambos tramos, el propio Ministerio de Transportes asegura que “se está trabajando en la valoración del grado de actualización que requieren los proyectos”, tras permanecer tantos años en espera de ser ejecutadas las obras.

JACA-PAMPLONA SE ETERNIZA

El tramo Jaca- Pamplona sigue acumulando retrasos año tras año sin existir, además, un horizonte claro de fin de obras. Un proyecto de nueva vía rápida que ejecutó en su vertiente navarra el entre 2004 y 2012, cuando culminó sus 46 km totales en 6 tramos. Sin embargo, en la parte aragonesa, donde las obras competen al Estado, la construcción ha avanzado lenta y de forma desigual, y las partidas presupuestarias previstas miran ya más allá de 2026.

En Aragón se abrieron al tráfico 6 tramos de la A-21, inconexos en varios casos, entre 2011 y 2019, y restan todavía otros 3. De ellos, como hemos apuntado, uno está en obras y los otros dos aún pendientes.

SITUACIÓN A PARTIR DE JACA

A partir de Jaca, y conduciendo rumbo a Cataluña por la que se denominó Autovía subpirenaica (la unión de la A-21 Pamplona-Jaca, el trazado Jaca-Huesca de la A-23 y la A-22 Huesca-Lleida), faltan asimismo por abrirse al tráfico otros tres tramos. Dos de ellos se encuentran en obras, y un tercero licitado y adjudicado ya. Más concretamente, dentro de la autovía A-23 las obras del tramo de 8,6 km correspondiente a la Variante de Sabiñánigo (también conocido como Sabiñánigo Oeste-Sabiñánigo Este) están en ejecución.

Por su parte, la construcción del otro tramo aquí pendiente, entre Sabiñánigo Sur y La Nave (8,7 km), ya ha sido adjudicado a Sacyr por 102,4 millones. Las obras se iniciarán después del verano y el proyecto incluye hasta cinco viaductos y un nuevo enlace en Ipiés y un semi-enlace en Sabiñánigo Sur.

HUESCA-SIÈTAMO

Finalmente, dentro de la autovía A-22 solo resta por completarse el tramo Huesca-Siétamo, de 12,8 km. La variante estaba prevista que se pusiese en marcha en 2021 y estamos en 2024 sin fecha de apertura. El contrato firmado con la UTE (Unión Temporal de Empresas) Copcisa y Vidal en junio de 2018 fue por 46,7 millones y 36 meses. Dos sobrecostes por valor de 9,2 millones ampliaron el plazo hasta septiembre de 2023 pero este tampoco se ha hecho efectivo. Las nuevas previsiones apuntan a finales del año 2025.