Un informe, encargado por la empresa Jamones Albarracín, revela que no existe ninguna fuga en las balsas próximas al barrio de Concud
Los responsables de esta industria aseguran que están invirtiendo para evitar las molestias por malos olores denunciadas por los vecinos
Teruel
Ese es el resultado del estudio realizado a través de termografía láser que detecta posibles fugas de agua. Isabel Dobón, CEO de la empresa Jamones Albarracín: "nos ha hecho un estudio de todas las balsas; de las antiguas, que se han reformado completamente, y de las nuevas; el estudio desvela que no hay ninguna fuga".
La empresa que ha realizado este estudio, lo seguirá haciendo de manera periódica, al mismo tiempo que otra empresa limpiará las balsas, en las que se deposita agua y sal, cada 15 días.
Los responsables de Jamones Albarracín están a la espera de que el Ayuntamiento de Teruel publique la resolución sobre la licencia de obras que solicitaron, en su momento, para la construcción de las nuevas balsas que sirvieron para reparar la primera en la que sí había una fuga.
Dobón ha reiterado que lo que llega a las balsas es agua y sal, ni sangre, ni restos de carne: "solamente es agua con sal de lavar los jamones, puede llegar algo de materia orgánica porque pasa a través de un jamón, pero no lleva trozos de nada, nosotros no manipulamos el producto". Por eso invitan a los vecinos de Concud a que visiten la empresa y conozcan el proceso que realizan.
La CEO de Jamones Albarracín concluía que esta empresa tiene en estos momentos 150 trabajadores y es líder, a nivel internacional, en este sector.