Sociedad

El servicio de Urgencias del Hospital Miguel Servet en obras

Son trabajos de renovación y mantenimiento que no impiden que se mantenga la actividad asistencial. La dirección del centro recomienda a los pacientes acudir a otros centros sanitarios siempre que sea posible

El servicio de Urgencias del Hospital Miguel Servet, en obras / Gobierno Aragón

Zaragoza

El servicio de Urgencias del Hospital Miguel Servet está en obras. Desde este lunes y hasta el 29 de noviembre se llevan a cabo trabajos de mantenimiento en sus instalaciones, a pesar de ello se mantiene la actividad asistencial, aunque se pide a la población que en la medida de lo posible, no acuda al servicio y utilice otros dispositivos de urgencias como por ejemplo, los Puntos de Atención Continuada.

En el Sector Zaragoza II, al que pertenece el Servet, se cuenta con PAC en Sagasta, Las Fuentes Norte, Almozara, Torrero o Valdespartera, con diferentes horarios de apertura. Algunos de los centros de salud del sector ofrecen también Atención Continuada de 17.00 a 20.00 horas de lunes a viernes. Se ha realizado una tabla informativa para que la población sepa dónde acudir en caso de necesitar atención sanitaria leve.

Desde el hospital también se insiste en que si hay un problema grave de salud se acuda a Urgencias del Hospital de referencia correspondiente o se notifique al 061. Algunos de estos problemas pueden ser dificultades respiratorias graves, dolor intenso en el pecho, traumatismos graves como fracturas, quemaduras extensas, lesiones graves en la cabeza, pérdida de conciencia, sangrados incontrolados, entre otros.

Nuevos circuitos asistenciales

El área de Urgencias del Hospital Universitario Miguel Servet atiende a una media de entre 400 y 500 pacientes al día, lo que representa una gran demanda asistencial, que influye inevitablemente en el desgaste de las distintas instalaciones que requieren de mantenimiento periódicamente

Tal y como explica su Jefa de Servicio, Ana Herrer Castejón, se ha hecho un gran esfuerzo a la hora de modificar circuitos para que la atención prestada se resienta lo menos posible. Toda el área seguirá en funcionamiento, aunque diversos espacios quedarán inutilizados por las labores de reforma y mantenimiento. Esto, involuntariamente, puede dificultar la labor asistencial que se presta, o conllevar un posible aumento de los tiempos de espera.