La renaturalización de Zaragoza, en el Congreso Nacional de Medio Ambiente en Ifema

Zaragoza

El Congreso Nacional del Medio Ambiente (Conama), celebrado en Madrid, ha puesto de manifiesto el papel clave de las ciudades en la lucha contra el cambio climático. Zaragoza ha sido una de las protagonistas del evento, destacando por sus proyectos de renaturalización urbana, que buscan transformar los espacios urbanos en áreas más sostenibles y saludables.

Guillermo Orduña, desde su sección SER Sostenibles del Hoy por hoy Zaragoza, nos resumen algunos de los temas centrales del encuentro, como la renaturalización de los espacios urbanos, una demanda creciente de los ciudadanos y un eje fundamental de la Estrategia de Zaragoza Climáticamente Neutra. Esta iniciativa, en línea con el compromiso europeo de lograr ciudades climáticamente neutras para 2030, propone reducir las emisiones y crear más zonas verdes, integrando la naturaleza en la vida urbana.

Entre los proyectos destacados se encuentra el Bosque de los Zaragozanos, que fomenta la plantación de árboles en colaboración con empresas, asociaciones y ciudadanos. Asimismo, el programa de recuperación del río Huerva trabaja en la creación de refugios climáticos, la regeneración de áreas verdes y la adaptación de infraestructuras a los fenómenos meteorológicos extremos. Por su parte, la iniciativa Patios por el Clima se centra en transformar los espacios recreativos escolares con la participación de la comunidad educativa.

Tatiana Gaudés, responsable de medio ambiente y movilidad en Zaragoza, ha enfatizado la importancia de combinar sostenibilidad con calidad de vida. Este enfoque se refleja en proyectos como los huertos escolares, el compostaje comunitario y la mejora de los espacios públicos. La visión de futuro incluye una ciudad más amable, con un equilibrio entre desarrollo urbano y naturaleza, que priorice a los peatones y amplíe las zonas verdes. El reto de Zaragoza no solo radica en diseñar nuevos barrios sostenibles, sino en adaptar la ciudad ya construida. Esto requiere superar desafíos técnicos y sociales, como la recuperación del Huerva, un río soterrado que necesita una ingeniería compleja para renaturalizar su cauce y taludes.

Con la experiencia de ciudades como Madrid, Barcelona o Vitoria, Zaragoza se posiciona como referente en sostenibilidad. Su participación en el Conama refuerza la idea de que las ciudades deben liderar la transición climática, combinando innovación, participación ciudadana y planificación estratégica. De cara a 2030, Zaragoza trabaja para convertirse en un modelo de sostenibilidad urbana, demostrando que el compromiso con el medio ambiente es compatible con la calidad de vida de sus habitantes.