Balneario de Panticosa, el “refugio” del descanso en el Pirineo Aragonés
Un lugar de referencia turística en las cuatro estaciones del año
Balneario de Panticosa
El Balneario de Panticosa descansa en un lugar mágico, vigilado desde siempre por las cumbres imponentes del Pirineo de Huesca, en el Valle de Tena. Las instalaciones del Balneario se levantan hasta los 1.636 m. de altitud. El complejo dispone de dos hoteles de 4****, el Gran Hotel y el Hotel Continental, el Espacio Termal del Gran Hotel, Balneario Termolúdico Termas de Tiberio y el Centro Termomedicinal Balneario del Quiñón.
Su oferta gastronómica tiene especial relevancia en todo el Balneario, a través de sus distintos restaurantes y cafeterías, donde se combinan las mejores materias primas para elaborar tanto los mejores platos tradicionales como los más sofisticados.
Todo el poder del agua termal
Las aguas del Balneario de Panticosa atraen numerosas miradas año tras año. Pero fueron los romanos que vivieron bajo la época de Tiberio, muchos siglos atrás, los primeros en verse reflejados en su transparencia.
El magnetismo que ejerce su poder encuentra su causa en la salud. Unas cualidades curativas que se han esparcido como líquido derramado hasta llegar a nosotros.
El carácter y elegancia del Espacio Termal del Gran Hotel lo hacen un espacio único para relajarse y disfrutar de tratamientos y experiencias en un ambiente exclusivo.
El edificio de Termas de Tiberio se integra en la naturaleza que lo rodea, creando un edificio de formas suaves y redondeadas, un espacio en el que la luz y el agua se funden en una atmósfera relajante y reparador
Relax
La historia del Balneario tiene las raíces profundas, muy ancladas en tierra firme. Recorrer su cronología nos lleva hasta tiempos inmemoriales. Si el pasado pudiese comunicarse con nosotros, lo haría a través
de unas construcciones que han presenciado episodios para enmarcar.
El roble y la piedra cenia son los materiales que sirvieron para edificar el Gran Hotel en 1896. Ha sido testigo de eventos inolvidables y de experiencias que algunos conservarán en sus retinas.
Unos recuerdos que otros también guardarán con mimo tras haberse hospedado en el Hotel Continental. La visión del sol colándose por sus cristaleras, con la luz brillando sobre su madera de cedro, se recibe como un regalo. Un ambiente acogedor en medio de un entorno idílico.
Gastronomía para disfrutar de productos de calidad
Aunque los secretos del Balneario estén sumergidos en sus aguas, el fuego también es capaz de revelarlos. Para descubrirlos, uno tan solo debe dejarse guiar por el aroma que desprenden sus restaurantes,
procedente del interior de las cocinas. Acomodarse en una mesa del Restaurante El Lago. Echar un vistazo a la carta de La Brasserie. Pedir la especialidad de la casa en un italiano como La Fontana. O escoger platos frescos y variados de nuestro Buffet del Hotel Continental, acciones que despiertan los sentidos. Una gastronomía que hará rugir los estómagos, así como el fuego hace crepitar la madera.
Distintos ambientes para disfrutar de productos variados y de proximidad. Una mezcla de tradición y originalidad
Las actividades
El entorno del Balneario ofrece un sinfín de posibilidades para los amantes de la naturaleza y los deportes de montaña, desde hacer escaladas por los picos más imponentes que nos rodean, Arnales, Garmo Negro
y Argualas o disfrutar en familia de rutas en raquetas de nieve, hasta practicar esquí nórdico en el maravilloso circuito recientemente homologado por los técnicos de la Real Federación Española de Deportes de
Invierno para poder albergar competiciones nacionales e internacionales
El Balneario en su historia cuenta con un importante listado de eventos deportivos internacionales con las concentraciones de equipos de élite de ciclismo, futbol, balonmano, baloncesto, esquí…., llegadas de eventos como la Vuelta a España, triatlones, pruebas de esquí nordico y grandes aventuras de montaña
El nórdico
Situado a solo 10 kilómetros del pueblo de Panticosa, junto al propio Balneario y al Refugio Casa de Piedra, el espacio es gestionado por Panticosa Activa, La estación destaca por combinar un acceso cómodo, múltiples zonas de aparcamiento y un paisaje espectacular que hace de cada jornada de esquí una experiencia inolvidable.
El espacio nórdico dispone de un total de 5,5 kilómetros de pistas divididas en tres niveles:
Verde: 1,5 km, ideal para principiantes. Azul: 4 km, para esquiadores de nivel intermedio. Roja: 5,5 km, diseñada para expertos.
Paseos con raquetas de nieve pata toda la familia
Si prefieres disfrutar del invierno a pie en lugar de deslizarte sobre esquís, el Espacio Nórdico del Balneario de Panticosa te ofrece un recorrido balizado para raquetas de nieve.