Gráficas Barbastro-Monzón dedica el calendario de 2025 a los “crismones de la diócesis”
El calendario recopila un total de 12 crismones, distribuidos a lo largo de los 12 meses del año
Barbastro
Gráficas Barbastro-Monzón, en colaboración con el Museo Diocesano Barbastro-Monzón, ha presentado su nuevo calendario para 2025 que está dedicado a los "crismones de la diócesis". Miguel Hecho, gerente de Gráficas Barbastro-Monzón, y María Puértolas, directora del Museo Diocesano, han presentado el nuevo calendario que consta de 14 páginas y se distingue por su diseño innovador y enfoque en la conservación y difusión del patrimonio cultural de la región. La introducción del calendario ha sido elaborada por el Obispo de la diócesis, Ángel Pérez.
Crismones: historia, identidad y arte en movimiento
Los crismones protagonizan el calendario. Cada página incluye una fotografía del crismón junto al monumento en el que se encuentra. Además, se ha incorporado un efecto gráfico que da sensación de movimiento, diseñado para captar la atención del espectador hacia estos elementos históricos.
Durante su intervención, María Puértolas ha destacado la importancia de esta elección temática, “los crismones son uno de nuestros elementos más identitarios. Dentro de nuestro patrimonio, podemos observar la gran cantidad que tenemos, y la mayoría de ellos tiene más de 800 años”. Asimismo, ha explicado el valor de los estudios documentales que acompañan esta iniciativa, explicando que estos “permiten acercarse a los significados tan profundos que tienen”.
Innovación y sostenibilidad
Otro de los aspectos destacados del calendario 2025 es su apuesta por la sostenibilidad. Según ha explicado Miguel Hecho, “como innovaciones, se usa papel más ecológico y con cierta textura, que le da un aspecto distinto y añade un componente táctil”. Esta elección no solo refuerza el compromiso ambiental de Gráficas Barbastro-Monzón, sino que también aporta un valor añadido al diseño del calendario.
Una mirada al patrimonio cultural de la región
El calendario incluye crismones provenientes de diversos puntos emblemáticos de la diócesis. “Este calendario es una forma más de conservar el patrimonio y difundirlo”, ha afirmado María Puértolas, quien ha asegurado que “no se nos van a acabar los temas para los calendarios venideros”.
Una tradición que se consolida
El calendario colaborativo del Museo Diocesano y Gráficas Barbastro-Monzón se ha convertido en una tradición esperada, que cada año encuentra en él una oportunidad para redescubrir la riqueza cultural de Aragón. Esta edición no solo celebra la identidad histórica de los crismones, sino que también establece un puente entre el pasado y el presente, conectando a las personas con el patrimonio que las define.
Con esta iniciativa, el grupo empresarial y el museo reafirman su compromiso con la cultura y el arte, invitando a todos a disfrutar de un calendario que, más allá de su funcionalidad, es un homenaje al legado histórico de la Diócesis de Barbastro-Monzón y sus alrededores.