Los esfuerzos por conseguir viviendas de alquiler en el Pirineo: el caso de Villanúa

Villanúa

Desde su creación, a principios de otoño del año pasado, la Bolsa de Alquiler promovida desde la Oficina de la Vivienda de Villanúa tiene registrados en su base de datos más de cuarenta solicitantes de alquiler, de los cuales un 60% residen ya en Villanúa y el resto proceden de diversos puntos del territorio.

Demanda, desde luego, hay, lo más difícil es conseguir oferta, por lo que han creado beneficios para el propietario. La Oficina ha firmado y confirmado al menos tres apartamentos en la Bolsa, y hay otras tres en proceso de ser alquilados. Además, se mantienen gestiones con otros propietarios para que incorporen sus viviendas al registro de la Oficina de la Vivienda, con lo que la oferta se podría ampliar de manera considerable, explican.

Descuentos de hasta el 95% en el IBI o seguro de impagos

La empresa pública Vivienda Villanúa asume la gestión integral del contrato de alquiler, redacción y tramitación; y recibe y deposita la fianza correspondiente en la Delegación del Gobierno de Aragón. Entre otras muchas facilidades para el propietario, el Ayuntamiento de Villanúa lo bonifica con un descuento del 95% en el recibo de Impuesto de Bienes Inmuebles de cada año que la vivienda permanezca en la bolsa, y además contrata un seguro para garantizarle el cobro del alquiler. En el caso de alquiler por temporada, la bonificación en el mencionado recibo será del 45%.

La Bolsa de Alquiler está sujeta a un reglamento que sirve de herramienta para contactar de manera ordenada a propietarios con personas y familias interesadas en este tipo de alquiler para vivienda habitual. El objetivo de la Oficina es lograr implicar, no solo a propietarios que tienen más de una vivienda de segunda residencia en la localidad, sino también a propietarios locales que tienen actualmente una vivienda vacía.

Otras medidas en materia de vivienda

El Gobierno de Aragón va a terminar la construcción de una promoción inacabada de 23 viviendas que adquirió el ayuntamiento. Saldrán al mercado con un alquiler asequible y estarán destinadas a los trabajadores del sector turístico y a los profesionales de servicios públicos básicos, explican desde la consejería de vivienda del Gobierno de Aragón.

Al margen de estas 23 viviendas, el ayuntamiento puso a la venta 17 parcelas para construir viviendas unifamiliares que deben ser de primera residencia.