José Oto y Felisa Galé: el amor a la vuelta de la esquina

Zaragoza

No hay ciudad que se precie sin su historia de amor única e intransferible. Aunque no parezca un fenómeno de las grandes urbes, donde todo queda algo más diluido, un grupo de vecinos del barrio de La Jota han lanzado una propuesta para que Zaragoza tenga la esquina del amor.

Y esa esquina está donde se unen las calles de Felisa Galé y José Oto, dos cantadores muy destacados en las décadas de los 40 y 50, que cuentan con una de las historias de la edad de oro de la Jota en Aragón. Como explicaba el presidente de la asociación de vecinos de La Jota, Juan Antonio Andrés "no se sabe si con intención o de casualidad hay un punto en el barrio en el que ambas calles se juntan".

Una iniciativa que ha sido bien recibida y que pusieron en marcha para San Valentín con la intención de que las parejas se hiciesen "una foto en este punto". Pero van más allá y han cursado un escrito al ayuntamiento para que "se ponga un monolito o algo que lo recuerde". De hecho, los propietarios de la vivienda de una de las esquinas "ofrecen su fachada para hacer un mural".

José y Felisa se quisieron a rabiar. Como contaba José Luis Melero, uno de los grandes estudiosos de la jota, fueron novios, compañeros de escenario, pero nunca se casaron. Una historia de amor peculiar en tiempos de posguerra y donde no se lo pusieron nada fácil. Además terminó demasiado pronto: Felisa murió en 1948, cuando sólo tenía 36 años. José lo hizo en 1961 con un funeral que congregró en el cementerio de Torrero a más de 100.000 personas.