Ramírez y Cordero ya son historia del Real Zaragoza
El club ha dado por finalizado el contrato con el entrenador y el director deportivo. Hoy, domingo, entrenamiento en la Ciudad Deportiva
Entrenamiento en la Ciudad Deportiva del Real Zaragoza ya sin Miguel Ángel Ramírez / Santiago Sáez Fuertes
Zaragoza
El Real Zaragoza ha dado por finalizado el contrato con el director deportivo Juan Carlos Cordero y el entrenador Miguel Ángel Ramírez, así como con el equipo de trabajo de la dirección deportiva y el cuerpo técnico del entrenador. El entrenamiento de esta mañana en la Ciudad Deportiva ha estado a cargo de Javi Suárez y Miki Lampre. Se perfila Gabi Fernández como candidato para dirigir el banquillo del Real Zaragoza.
La puntilla fue la bochornosa derrota en Almería, por 4 a 1, el décimo y último partido del técnico canario al frente del equipo. Hasta tal punto que un grupo de aficionados se trasladó ayer por la noche hasta el Aeropuerto de Zaragoza a recibir con abucheos a la expedición, con gritos de "Jugadores, mercenarios", "Cordero Dimisión" y "Ramírez, vete ya". El entrenador fue el único que cubrió su rostro con una capucha para intentar no ser identificado por los aficionados. La Guardia Civil tuvo que acordonar la zona para que la situación no llegara a mayores.
En un comunicado, el club apunta que "queremos agradecer la dedicación, la profesionalidad, el esfuerzo y el trabajo que tanto Juan Carlos como Miguel Ángel han demostrado durante su etapa en el Real Zaragoza". Asimismo, "les deseamos la mayor de las suertes en los nuevos retos profesionales que afronten a partir de ahora".
Juan Carlos Cordero erró en su segunda apuesta en el banquillo al confiar en Miguel Ángel Ramírez, igual que fallo con la elección de Julio Velázquez. Además, el hasta hoy director deportivo del club dejó incompleto el proyecto al cierre de la ventana de verano y en la de invierno tampoco fue capaz de incorporar, al menos, un central.
Mientras, Ramírez, que cogió al equipo a 6 puntos de los puestos de playoffs y con el objetivo de meterlo en la pelea real por el ascenso, lo deja hundido física y mentalmente y al filo del abismo después de sumar tan solo 7 puentos en los 10 partidos que ha dirigido al Real Zaragoza sumando una única victoria en Málaga.
El próximo y cuarto entrenador de la temporada tiene ante sí el reto de revivir a un cadáver que tiene por delante 11 jornadas para evitar el descenso de categoría y salir del fútbol profesional, con lo que conlleva para un club histórico del fútbol español.
