Sijena pide repetir el juicio al exconseller Puig tras su "incomprensible" absolución

Huesca

El Ayuntamiento de Sijena ha pedido al Supremo que anule la "incomprensible" absolución del exconseller de Cultura durante el 1-O Lluís Puig, por no devolver en 2017 las 44 piezas que estaban en Cataluña, y que asuma la celebración de una nueva vista en que se le declare culpable de desobediencia. Así lo sostiene el Ayuntamiento de Villanueva de Sijena en su recurso, al que ha tenido acceso EFE, contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que absolvió a Puig al concluir que no existe "prueba suficiente" de que incurriera en una negativa "reiterada y persistente" y que mantuviera una "voluntad rebelde" para negarse a devolver las obras al Monasterio de Sijena.

En su recurso, el abogado que representa al Ayuntamiento de Sijena, Jorge Español, considera "incomprensible" la absolución de Puig, actual diputado de Junts en el Parlament, a quien califica como un "furibundo independentista" que fue "rebelde" a la hora de cumplir la sentencia de un juzgado de Huesca que le ordenaba devolver la piezas.

Pese a que la Fiscalía, que pedía dos años de inhabilitación para Puig, ya ha anunciado que no recurrirá la absolución del exconseller, Español confía que el ministerio público se acabe sumando a su recurso, en el que plantea la nulidad de la sentencia y la repetición del juicio por parte del Tribunal Supremo.

El recurso argumenta que la propia sentencia del TSJC ya sostiene en sus hechos probados que Puig no llevó a cabo "actividad alguna" para hacer efectivo el traslado al Monasterio de Sijena de las 44 piezas depositadas en el Museo de Lleida, por lo que considera que la desobediencia ha quedado "plenamente" acreditada. "La supuesta voluntad o retórica de querer cumplir la orden judicial resulta en este caso totalmente irrelevante y despreciable", apunta el recurso del Ayuntamiento de Sijena.

Es más, el recurso recupera unas declaraciones que hizo Puig tras su absolución, en las que insistía que le habían exonerado porque pidió más tiempo para cumplir la resolución, y lamenta que "un furibundo independentista como éste no pudo menos que desautorizar la sentencia, revelando que, aunque se le hubiesen dado más tiempo, tampoco hubiese devuelto las 44 piezas".

"Es algo que ya se lo advertimos gravemente a la sala y que todo el mundo sabía, al ser Puig un furibundo independentista rebelde a cumplir esta sentencia civil y que deja ahora la sentencia aquí recurrida en total zozobra y penumbra", apunta.

Entre otros motivos, el abogado esgrime también que el juicio no se podía celebrar en ausencia de Puig -que reside en Bélgica, huido de la justicia española por el 1-O-, y que además el mandato del juzgado de Huesca para que devolviera las piezas se tenía que cumplir en Aragón, por lo que cree que el tribunal competente para asumir el caso es el Supremo.

También insiste que junto a Puig se tendría que haber juzgado a su antecesor, Santi Vila -que al no ser aforado se sentará en el banquillo ante un tribunal ordinario el próximo mes de mayo-, lo que considera una "grosera, patente y palmaria" vulneración del derecho, ya que cree que la "desobediencia" fue "concertada y solidaria".

En su sentencia absolutoria, el TSJC destacó que no se podía "descartar" que el incumplimiento de la orden judicial por parte de Puig obedeciera a "causas distintas" a una actitud "manifiestamente rebelde", ante los "obstáculos administrativos" que le plantearon al entonces conseller sus asesores para devolver la piezas.