Aranceles de Trump en Aragón: de la preocupación en el vino y la maquinaria a la búsqueda de otros mercados

Zaragoza y Teruel

748 empresas de Aragón exportan a Estados Unidos. De ellas, un 30% basan una parte importante de su negocio en la venta al país norteamericano. Las amenazas de Trump se han cumplido y ha impuesto aranceles de un 20% los productos procedentes de la Unión Europea. Dos sectores monopolizan estas exportaciones: el de los bienes de equipo y el agroalimentario. Aunque las ventas al gigante americano solo representa el 2% en Aragón; la guerra arancelaria de Trump contraerá la demanda y disminuirá la producción industrial.

Del "Día de la Liberación" de EEUU, a la jornada de preocupación para 227 empresas en Aragón. Las cuentas de explotación de estas compañías se leen en dólares porque el país estadounidense es su principal cliente. La jefa de estudios de mercado de Cámara de Comercio de Zaragoza, Marta Sorbet, apunta que "hay 748 empresas que exportan a Estados Unidos, pero son 227 las que prácticamente el total de las exportaciones, con un total del 98%".

Pero hay más. Los aranceles no son igual para todos los países y eso puede restar competitividad a aquellos que venden en EEUU. Sorbet ponía el vino como ejemplo. "Si vemos quiénes son los principales vendedores de vino a Estados Unidos tenemos que, además de los países europeos, están Nueva Zelanda, Australia o Argentina". Estos tres países "están en mejores condiciones que nosotros" porque "mientras nuestra medida adicional impuesta es de un 20%, ellos se han quedado en el 10%".

Este plan de aranceles no solo afectará a las empresas, también al bolsillo del resto de los mortales.

Sector de vino

Calma tensa en las denominaciones de origen vinícolas de Aragón. Aunque la administración Trump ha pasado de fijar unos aranceles del 200%, a dejarlos en un 20%, el precio en los lineales americanos subirá. Aunque este gravamen entra en vigor el 9 de abril, las bodegas aragonesas llevan 15 días frenando sus exportaciones a Estados Unidos.

El plan arancelario de Donald Trump ha provocado cierto alivio entre el sector del vino aragonés. El magnate ha rebajado el impuesto al 20% y eso supone que puedan seguir exportando al país americano. Desde el miércoles que viene, una botella de vino aragonesa subirá de 10 a 12 dólares.

Eduardo Ibáñez, presidente de la Denominación de Origen Campo de Borja, afirma que "esta noticia no es tan destructiva como hace un mes, pero es más considerable que lo que anunciaban de un 200%".

Ya hay consecuencias

Trump lleva desde el 13 de marzo amenazando sobre este gravamen y eso ha tenido consecuencias. Las bodegas aragonesas llevan 15 días instaladas en la incertidumbre. No han recogido los pedidos que llegaban de Estados Unidos, sus almacenes se han llenado.

Un ejemplo, la Bodega Borsao, en Borja, tiene retenidos más de 250 mil euros. Emilio del Caso, director general, "los contenedores no venían a recoger la mercancía, el transporte no los traía para cargar y eso ha provocado unos días de impacto importante en un sector que se ha visto paralizado por esta cuestión".

Trufa y piezas de aeronaves: buscando alternativas desde Teruel

La trufa y piezas de aeronaves van a ser los productos turolenses más afectados por los nuevos aranceles anunciados por Trump. En ambos casos, productores y empresas, buscan mercados alternativos.

El mercado estadounidense es minoritario para las exportaciones de la provincia de Teruel. En el último año rozaron el 5%, lo que supuso 21 millones de euros. En cuanto a operaciones no llegan a 1.000, es decir, el 3% del total. Con ese volumen, Carmen Serrano, responsable de Exportaciones de la Cámara de Comercio de Teruel, indicaba que es lógico que las empresas que exportan a ese país estén preocupadas, pero sugería que el "mundo es muy grande".

Apunta que "es lógico que estén preocupadas" pero "tenemos países emergentes y en Teruel tenemos muchas posibilidades de estar ahí". La provincia de Teruel está bien posicionada en otros países, y Cámara Teruel ya ha trasladado a todos los afectados su ayuda para buscar otros mercados.

Los productos que llegan a Estados Unidos procedente esta provincia es maquinaria, piezas de aeronaves, vidrio, gres, productos cerámicos, preparaciones de hortalizas y conservas de fruta, carne y trufa.

Restaurantes de alta cocina de la costa este y oeste norteamericana compran este producto a comercializadoras de Sarrión. La primera repercusión para los distribuidores de ese país es que subirán los precios, tal y como explicaba, Sofía Agustín, responsable de negocio de la empresa que comercializa este producto. "Quizá el más perjudicado sea el propio norteamericano, que quiera disfrutar de nuestra trufa en alta hostelería y no pueda conseguir el producto". Todas las empresas y productores afectados buscan, desde que Trump anunció esta guerra comercial, otros mercados. En el caso de la trufa, los asiáticos.

Otra empresa, en este caso, PYRSA, de Monreal del Campo vende es Estados Unidos el 5% de su producción de piezas de maquinaria. No es su principal mercado, pero sí del grupo al que pertenece. Fernando Hernández, director de PYRSA, apunta que "podría ser el 20% de la facturación para el grupo". La factoría PYRSA, con una plantilla de 400 empleados, vende piezas de maquinaria y para trenes de alta velocidad, principalmente a Alemania, Canadá, Australia y países latinoamericanos.