Los alcaldes de Aínsa y Biescas reclaman soluciones ante la falta de vivienda en el mundo rural
Enrique Pueyo y Lorena Cajal denuncian que la nueva la Ley de Vivienda de Aragón no contempla medidas para frenar el impacto de los alojamientos turísticos y garantizar el acceso a la vivienda

María Rodrigo Lorena Cajal Isabel Manglano y Enrique Pueyo. Foto: Psoe

Aínsa
Los alcaldes socialistas de Aínsa y Biescas han reclamado en las Cortes de Aragón que se modifique el Proyecto de Ley de Vivienda para llevar a cabo una verdadera regulación del mercado inmobiliario en los municipios del Aragón y garantizar el acceso a la vivienda para residentes y trabajadores locales, uno de los mayores problemas de ambas localidades.
Durante su intervención en las audiencias legislativas sobre este proyecto de ley, el alcalde de Aínsa, Enrique Pueyo, ha recordado la complicada situación del mercado inmobiliario en la comarca de Sobrarbe, donde no se ha construido ninguna vivienda nueva desde 2007. En un municipio que ha pasado de 1.500 habitantes en los años 90 a más de 2.400 en la actualidad, la escasez de vivienda ha generado una fuerte subida en los precios de alquiler y venta.
“La falta de obra nueva y la proliferación de alojamientos de uso turístico han provocado muchos problemas en el acceso a la vivienda. Desde el ayuntamiento hemos trabajado para regular el alquiler turístico dentro de nuestras competencias urbanísticas, estableciendo limitaciones en el número y ubicación de estas viviendas. Sin embargo, es fundamental que la Ley de Vivienda de Aragón contemple mecanismos más efectivos para que los ayuntamientos puedan gestionar este problema y no nos pongan problemas”, ha explicado.
Entre las medidas propuestas por el primer edil se encuentra una regulación más estricta de las viviendas de uso turístico, herramientas para que los ayuntamientos puedan movilizar viviendas privadas desocupadas y la posibilidad de establecer límites a los precios de alquiler en zonas de alta demanda. “En nuestro pueblo los precios están disparados lo que dificulta todavía más la posibilidad de poder alquilar o comprar una vivienda”, ha denunciado.
“Mucho se habla de la despoblación sin conocer de verdad qué es y cómo solucionarla. La vivienda es uno de los principales factores para revertir esa falta de población. Porque al final solo se podrá vivir en Zaragoza o en alguna otra ciudad que estén construyendo viviendas”, ha lamentado Pueyo.
Además, el alcalde de Aínsa ha pedido al Gobierno de Aragón que aumente las ayudas destinadas a la rehabilitación de viviendas en municipios rurales, ya que las subvenciones actuales resultan insuficientes para cubrir los elevados costes de recuperación de inmuebles en estas zonas. “Si realmente queremos combatir la despoblación, la vivienda debe ser una prioridad en la agenda política”, ha afirmado.
Ambos alcaldes ha coincidido en que sin medidas concretas y ágiles, la tendencia de incremento en los precios de la vivienda y la escasez de oferta continuará afectando negativamente a los municipios del Pirineo, dificultando la fijación de población y el desarrollo económico local.
Por su parte, la alcaldesa de Biescas, Lorena Cajal, ha mostrado su preocupación porque este proyecto de ley contiene una importante laguna: no tiene en cuenta a los municipios más pequeños y rurales. En concreto, ha puesto sobre la mesa la problemática de su municipio, donde el 80% de las viviendas están destinadas a segundas residencias lo que ha provocado unos altos precios que impiden a la población local fijar su residencia en Biescas. “La gente quiere vivir en nuestro pueblo y no puede”, ha denunciado.
“Esta ley no va a solucionar los graves problemas de vivienda de nuestros municipios. Necesitamos que se apueste por la rehabilitación de viviendas vacías, que se incentive la creación de viviendas de alquiler, en vez de forzar el crecimiento desmesurado de nuevas urbanizaciones”, ha exigido.
Por todo ello ha propuesto cambios en la ley que atajen el problema de la vivienda desocupada; cambien los criterios de adjudicación de viviendas protegidas de manera que los empleados del sector turístico no desbanquen a familias y jóvenes que quieren fijar su residencia en los municipios; se fortalezcan los mecanismos de intervención en el mercado inmobiliario para evitar que el alto precio de los alquileres impidan a los habitantes locales fijar su residencia en los municipios; se garanticen más incentivos para la construcción de viviendas asequibles; se legisle sobre los alojamientos turísticos, que omite la ley, para que no desplacen a los residentes locales.
Para concluir, ambos alcaldes subrayan además que el Plan Pirineos ha olvidado a muchos municipios pirenaicos como Biescas y Aínsa. “Se han invertido millones de euros, pero sin abordar los problemas reales de vivienda. En lugar de ser una solución, se ha convertido en un problema en sí mismo. Es algo importante en lo que debemos reflexionar”, han criticado.




