¿Es el momento de un nuevo PICH para el Casco?
Los vecinos piden una actuación integral para el espacio histórico de la ciudad, como los hubo entre 1996 y 2020
Zaragoza
El espacio Concejales en Pleno del Hoy por hoy Zaragoza se ha centrado hoy en el futuro del segundo casco histórico más grande de España, el de la capital aragonesa, que se extiende desde el Gancho hasta la Madalena y al otro lado del río con el Arrabal. Los vecinos vienen denunciando hace años la degradación de algunas partes del distrito, motivada por el estado de algunos edificios.
Hace una semana el Ayuntamiento de Zaragoza ha anunciado la inspección de 277 inmuebles en la zona de Zamoray-Pignatelli. Víctor Serrano ha destacado los desalojos realizados en inmuebles adquiridos por el Ayuntamiento. En la Madalena, se ha producido el desalojo de un bloque por riesgo de ruina. Los vecinos han sugerido retomar políticas derivadas de un nuevo Plan Integral del Casco Histórico (PICH).
En el debate radiofónico, Víctor Serrano, consejero de urbanismo del Partido Popular, ha destacado la inversión y el trabajo realizado desde 2019 en el casco histórico de Zaragoza, especialmente en la zona de Pignatelli. Ha mencionado que se han invertido más de 4 millones de euros en la adquisición de fincas y en actuaciones urbanísticas concretas, como la iluminación y la limpieza de solares. Serrano ha subrayado la necesidad de seguir invirtiendo en vivienda pública y en la rehabilitación de áreas degradadas, destacando que el casco histórico de Zaragoza es uno de los más extensos de España y requiere una estrategia continua y expansiva.
Frente a Serrano, la concejala del PSOE, Lola Ranera, ha enfatizado la importancia de la identidad y la transversalidad en las políticas para el casco histórico. Ha criticado la visión de convertir el casco en un parque de atracciones para turistas y ha defendido la necesidad de crear un espacio agradable para los vecinos. Ranera ha recordado proyectos integrales como el de la calle Las Armas, que combinaban urbanismo, vivienda y actividades culturales, y ha insistido en que las políticas deben ser integrales y no centrarse únicamente en el urbanismo.
En el debate ha participado el presidente del Distrito Casco Histórico, Armando Martínez, del grupo municipal Vox, que ha dividido el casco histórico en tres zonas: San Pablo, la zona central y la Magdalena, destacando que cada una tiene realidades distintas. Ha señalado la necesidad urgente de inversión en la zona de San Pablo, que presenta una mayor degradación urbanística y social. Martínez ha criticado la falta de continuidad en las actuaciones y ha insistido en la importancia de un presupuesto adecuado para la regeneración de estas áreas, subrayando que la seguridad y la renovación de calles deben ser prioridades.
Argumentos que ha querido puntualizar Suso Domínguez, de Zaragoza en Común, que ha rechazado la visión catastrofista del casco histórico y ha criticado el abandono de los barrios por parte del Partido Popular. Ha lamentado la falta de continuidad del plan integral del casco histórico y la carencia de participación ciudadana en las decisiones. Domínguez ha señalado que muchos presupuestos destinados a la regeneración no se han ejecutado y ha denunciado la especulación urbanística que permite la degradación de edificios patrimoniales. Ha abogado por una estrategia integral que aborde no solo el urbanismo, sino también la convivencia, el patrimonio y el comercio.




