¿Y si ante el reto medio ambiental actuamos pensando que sí se puede?

Zaragoza

Muchas veces, más que la dificultad real de una tarea, es nuestra propia mente la que nos detiene. Nos repetimos que no se puede, que es demasiado tarde, demasiado difícil, que ya no es momento. Pero hay historias que rompen esos límites autoimpuestos y nos recuerdan que sí, que se puede. Una de esas historias ha protagonizado la última entrega de SER Sostenibles en Hoy por Hoy Zaragoza, de la mano de Guillermo Orduña.

Guillermo ha compartido una vivencia muy personal: su amigo Pepe Pellegrín, un hombre de más de 80 años, ha decidido desafiar esa idea de que hay cosas imposibles a ciertas edades. Ha montado su bicicleta con el objetivo de ver hasta dónde podía llegar. Y lo ha hecho. Ha recorrido 474 kilómetros en 24 horas, convirtiéndose en la persona mayor de 80 años que más distancia ha pedaleado en ese tiempo. Lo ha hecho bajo viento, lluvia y cansancio, pero también con perseverancia. Su hazaña ha sido una fuente de inspiración para reflexionar sobre otras “imposibilidades” que asumimos sin cuestionarlas.

Guillermo ha utilizado esta experiencia como punto de partida para hablar de los récords menos deseables que también estamos batiendo, como sociedad. Ha recordado que actualmente consumimos unos 92 millones de toneladas de ropa al año, muchas de ellas con una vida útil extremadamente corta. Se ha señalado que casi el 90% de las prendas acaban en vertederos o son incineradas en menos de seis meses. Cada segundo, un camión lleno de ropa es desechado, y algunos de estos vertederos son ya tan grandes que se han podido ver desde el espacio, como ocurre en el desierto de Atacama, en Chile.

Otro récord preocupante ha sido el del plástico. Ha aumentado sin freno su producción y desecho, hasta el punto de formar verdaderas “islas” flotantes en el océano. Según se ha expuesto, la cantidad de plástico que se filtra fuera de los sistemas de gestión de residuos podría aumentar un 50% para el año 2040, lo cual tendría un impacto ecológico y económico incalculable.

Pero frente a estos datos alarmantes, también se han compartido soluciones reales. Se ha hablado del trabajo de la organización The Ocean Cleanup, que ha diseñado sistemas impulsados por barcos y guiados con tecnología satelital para recoger los plásticos del mar. Y también del proyecto premiado por la ONU que ha permitido detectar más de 300 emisiones de metano gracias a imágenes satelitales, reduciendo significativamente su impacto.

Así, la sección ha dejado un mensaje claro: a veces creemos que no se puede, pero la realidad es que sí se ha podido. Como ha demostrado Pepe desde su bicicleta o como han hecho estos proyectos que combinan tecnología y voluntad para luchar por un planeta más limpio. En esta Semana Santa, el mejor descanso puede ser detenerse un momento, reflexionar y volver con ganas de pedalear hacia el cambio. Porque sí, se puede.