Defendiendo la comida tradicional, incluso con "la satisfayer de aire"

Huesca

Si hablamos de comida, humor, croquetas y odio a la lechuga iceberg, hablamos de Mikel López Iturriaga. Así lo ha presentado Enrique Torguet, responsable de comunicación y marketing de AMBAR, en la segunda mesa de Territorios Mágicos, titulada “Del microondas a la cocina. El arte de comer bien sin dramas”, donde ambos compartieron escenario, confesiones y reflexiones.

Con su estilo desenfadado y directo, Iturriaga, más conocido por su proyecto El Comidista, ha relatado cómo nació este espacio digital que ha cambiado la forma de hablar sobre gastronomía en España. “Me quedé en paro”, confesó sin rodeos, explicando que El Comidista es mucho más que una web de recetas: “Es un lugar donde tiene espacio todo lo relacionado con la cocina”.

Durante la conversación, tanto él como Torguet han reivindicado la cocina de toda la vida, esa que ahora, “le han puesto nombres raros” bromeaba. También han reflexionado sobre la moda de los electrodomésticos estrella como la Thermomix o las freidoras de aire, a la que Mikel ha apodado con humor “la Satisfayer de aire”. Aunque ha reconocido su utilidad, ha advertido: “Estos aparatos están bien porque ayudan a quitar el miedo a los que lo tienen a cocinar, pero no hacen milagros”.

Con la franqueza que le caracteriza, Iturriaga ha abogado por una cocina sencilla: “Una buena cocina solo necesita dos cuchillos, el cebollero y uno un poco más grande; unas sartenes y unas cazuelas”. Y ha ido más allá, analizando la relación casi visceral que los españoles tienen con la gastronomía: “Nos creemos más de lo que somos. Tenemos una relación muy emocional y visceral con la comida, igual que con la política o el deporte. Saltamos a la mínima y criticamos todo. Pero conservamos el cariño por nuestros platos de siempre y el aspecto social de la comida. Todas nuestras reuniones sociales giran en torno a una comida”.

El periodista también aprovechó para lanzar un mensaje importante sobre el desperdicio alimentario doméstico: “No sabemos cómo debemos conservar la comida cuando llega del supermercado. El mayor desperdicio gastronómico se produce porque no sabemos cómo mantener la comida para que nos dure más en casa”.

Uno de los momentos más divertidos de la charla llegó con el juego que Torguet propuso: ¿Qué le daría de comer Mikel a figuras como Ayuso, Rosalía, Pedro Sánchez o incluso Trump? Las respuestas han desatado las risas del público.