La Santa Sede concede un Año Jubilar a Barbastro-Monzón por el 900 aniversario del fallecimiento de san Ramón


Huesca
La Diócesis de Barbastro-Monzón celebrará un Año Jubilar Extraordinario en conmemoración del 900 aniversario del fallecimiento de san Ramón, segundo obispo de la diócesis y su venerable patrón, según ha dado a conocer este sábado el obispo, Ángel Pérez Pueyo.
Este Año Santo, que comenzará el 20 de junio de 2026 y se prolongará hasta el 21 de junio de 2027, ofrecerá a los fieles una oportunidad única para la gracia, la reflexión y la renovación espiritual, honrando el legado de un santo cuya vida y obra dejaron una huella imborrable en la historia y la fe de la región.
EL Jubileo concedido permite obtener indulgencias plenarias para los fieles que arrastran penas temporales que aún deben por los pecados ya perdonados en el sacramento de la confesión.
Para Pérez Pueyo, San Ramón fue "un obispo no al uso" que falleció en 1126 y fue canonizado apenas una década después. Recordado por su incansable labor pastoral, su espíritu conciliador y su profunda dedicación al servicio, fue "un verdadero pastor de almas que guió a su rebaño con sabiduría y amor en los difíciles comienzos del siglo XII, un faro de piedad y guía para generaciones de fieles", según ha descrito.
Esa conmemoración diocesana recogerá el testigo de este Año Jubilar de la Esperanza, y servirá para revitalizar la vida espiritual y pastoral diocesana, y para reafirmar el compromiso con los valores que san Ramón encarnó: los de un pastor que dotó a su pueblo de identidad y que, comprometido con ella, sirvió a Dios.
Su muerte, y el reconocimiento por todos los estamentos de su figura y obra, ha engrandecido el legado del patrón. San Ramón, cuya muerte acaeció en 1126 y fue canonizado apenas una década después, es una figura central para la Diócesis de Barbastro-Monzón.
Durante su episcopado, según resaltan desde la diócesis, recorrió la recién nacida y desestructurada diócesis de Barbastro-Roda, restableciendo el culto y promoviendo las artes. Hombre conciliador y celosos del culto divino, impulsó la construcción y consagración de importantes templos románicos, como Santa María de Alaón, Roda de Isábena, y las iglesias de San Clemente y Santa María de Tahull en el Valle de Bohí.
Expulsado de Barbastro y desterrado por tensiones políticas y eclesiales, regresó a su sede con renovado fervor y continuó su labor pastoral y caritativa hasta su muerte.
La celebración de este Año Jubilar en 2026 supone para la diócesis "una invitación a todos los fieles a profundizar en la fe, a peregrinar y a buscar la intercesión de San Ramón, cuyas virtudes de oración, caridad y servicio continúan siendo un ejemplo para nuestra comunidad diocesana y para toda la Iglesia".
La diócesis tiene previsto dar a conocer próximamente el programa de actividades y celebraciones que tendrán lugar durante el Año Jubilar para conmemorar este aniversario.




