"Si tu gato respira con la boca abierta, corre al veterinario"

Zaragoza

Con la llegada de una nueva ola de calor en Aragón, muchas personas se han preguntado cómo afecta este extremo climático a sus animales de compañía. En el programa Hoy por Hoy Zaragoza, Sonia Sáez, veterinaria y responsable de comunicación de Purina España, ha compartido recomendaciones fundamentales para cuidar de perros y gatos en estas circunstancias.

Sáez ha recordado que los animales "no tienen la misma capacidad de regular la temperatura que los humanos, ya que no sudan por todo el cuerpo. En su caso, la pérdida de calor se produce a través de zonas muy limitadas, como las almohadillas plantares y el hocico". Por eso, ha insistido en que las mascotas necesitan de nuestra ayuda para mantenerse frescas.

En el caso de los gatos, ha explicado que también sufren el calor, aunque lo muestren de forma más sutil que los perros. Mientras que estos últimos jadean para regular la temperatura, si un gato respira con la boca abierta, se trata de una urgencia veterinaria, ya que podría estar en peligro de muerte. Se ha recomendado prestar atención a cambios en el comportamiento, como menor actividad, búsqueda de lugares sombríos o posturas estiradas sobre superficies frescas.

En cuanto a los perros, la experta ha insistido en evitar los paseos durante las horas de más calor y ha recomendado realizarlos únicamente a primera y última hora del día. También ha advertido sobre los riesgos de la exposición al sol directo, tanto por el peligro de quemaduras en las almohadillas por el asfalto caliente, como por la radiación solar en la piel, especialmente en razas de pelaje blanco o piel clara. En estos casos, se ha aconsejado el uso de cremas solares específicas para animales, bajo recomendación veterinaria.

Además, Sáez ha alertado sobre las razas más sensibles al calor. Ha mencionado a los perros adaptados a climas fríos, que pueden sufrir en ambientes calurosos, así como a las razas braquicéfalas —como bulldogs o bóxers—, que presentan dificultades respiratorias y mayor riesgo de colapso durante los días de altas temperaturas.

Qué hacer si vemos estos síntomas

Para identificar posibles signos de golpe de calor, Sáez ha recomendado observar la frecuencia del jadeo, la coloración de las mucosas (encías, párpados) y el estado general del animal. Encías muy pálidas, enrojecidas o azuladas pueden indicar una mala oxigenación, y otros síntomas graves como la pérdida de equilibrio o la micción involuntaria deben hacernos acudir inmediatamente al veterinario.

Finalmente, ha subrayado la importancia de mantener a las mascotas bien hidratadas. Ha propuesto cambiar frecuentemente el agua, usar recipientes grandes y ofrecer alimentación húmeda para incrementar el aporte hídrico.

Sonia Sáez ha recordado que, al igual que los humanos, los animales también han sufrido las consecuencias de esta segunda ola de calor del verano, y ha animado a los propietarios a extremar las precauciones para proteger su salud.