Caso Ateca: un año después, 8 imputados por torturas y abusos en el centro de menores

Zaragoza

Esta semana se ha cumplido un año desde que se destapó el caso del centro de menores de Ateca, en Zaragoza. La investigación, aún abierta, ha sacado a la luz graves denuncias por parte de varios jóvenes que aseguran haber sufrido torturas, agresiones físicas y sexuales por parte de sus monitores.

Actualmente hay ocho personas imputadas, aunque no se descarta que el número aumente. Solo uno de los investigados permanece en prisión: se trata del presunto cabecilla, señalado por estar presente en múltiples hechos denunciados y por haber tenido la oportunidad de cometer los delitos.

Jorge Piedrafita, abogado de una de las víctimas, advierte que la causa ya supera los 2.000 folios y que aún queda instrucción por delante. “Estamos pendientes de nuevas declaraciones y pruebas. Es una investigación larga y compleja”, afirma.

Además de los delitos iniciales de tortura y vejaciones, han aparecido otros cargos como amenazas, delitos contra la integridad moral, pornografía infantil —por la grabación de menores desnudos— y varias agresiones sexuales cometidas dentro del centro.

Las víctimas se sienten abandonadas por la administración, que, según el abogado, “se ha puesto de perfil para evitar responsabilidades”. Piedrafita teme que este caso sea solo la punta del iceberg y que prácticas similares puedan estar ocurriendo en otros centros de menores.