El Castillo de Cadrete, una sorpresa a las puertas de Zaragoza

Zaragoza

En la sección Aragoneando del Hoy por Hoy Zaragoza hemos descubierto un lugar que sorprende a todo aquel que se acerca a conocerlo: el Castillo de Cadrete. Apenas a quince minutos de la capital aragonesa, esta fortaleza del siglo X se levanta sobre el valle del Huerva como un balcón privilegiado desde el que contemplar una panorámica espectacular. Su visita se convierte en una experiencia que combina historia, arqueología, leyenda y paisaje.

La guía del castillo, Ana María Royo, ha recordado que su origen se remonta al año 935, cuando Abderramán III mandó levantar varias construcciones defensivas en la zona para asegurar el control del valle. De aquellas fortalezas, la única que se conserva en pie y es visitable es la de Cadrete. Tras una importante intervención en 2011, hoy es posible ascender hasta lo alto de la torre, situada a 80 metros, y disfrutar de una de las vistas más hermosas de la comarca, especialmente al atardecer.

El castillo no solo conserva su imponente torre y parte de los recintos superior e intermedio, sino también restos del patio de armas, cocinas, establos y un trujal, que evidencian cómo fue habitado y utilizado hasta bien entrado el siglo XVII. A lo largo de cinco campañas de excavaciones arqueológicas se han ido sacando a la luz elementos que permiten comprender mejor la vida en esta fortaleza musulmana primero, y cristiana después.

Uno de los atractivos añadidos a la visita son las piezas cerámicas recuperadas, así como pequeños objetos metálicos hallados durante las excavaciones, que se pueden ver en el Centro de Interpretación del Castillo, ubicado dentro del ayuntamiento. El Museo Provincial de Zaragoza ha cedido algunas de las piezas más significativas para que puedan ser contempladas en el Centro de Interpretación del Castillo, situado en el propio ayuntamiento de Cadrete. Tal y como ha explicado Ana María Royo, "este espacio se reinaugurará el 25 de septiembre con una exposición renovada que ayuda a contextualizar lo que el visitante observa sobre el terreno".

La experiencia comienza precisamente delante del ayuntamiento, donde se da la bienvenida al grupo. Desde allí se inicia el breve ascenso a pie hasta el castillo, un recorrido que no dura más de cinco minutos pero que requiere calzado cómodo o de trekking por la pendiente. Una vez en la cima, la guía relata la historia del enclave, sus leyendas y curiosidades, en ocasiones con propuestas especiales como las visitas al atardecer, que se acompañan de música y cuentos para toda la familia.

La oferta cultural se complementará este próximo mes de septiembre con actividades temáticas, como las jornadas medievales de finales de mes, en las que la guía se transformará en una antigua propietaria del castillo para trasladar a los visitantes al siglo XIV. Todo ello convierte a Cadrete en un destino cercano y perfecto para una escapada de fin de semana.

Las visitas se organizan los viernes, sábados y domingos, con aforo limitado a 15 personas por grupo, por lo que es imprescindible reservar previamente a través de la web del Castillo de Cadrete, el correo electrónico oficial o en el teléfono 652 122 811.

El Castillo de Cadrete es, en palabras de su guía, “un regalico por descubrir”. A muy poca distancia de Zaragoza, nos invita a valorar el patrimonio que tenemos cerca de casa antes de mirar fuera. Una sorpresa que merece la pena vivir.