Ansó viste su historia desfilando entre trajes, música y escenas de antaño

Huesca

Aunque se pronosticaba lluvia, la mañana de este domingo ha aguantado soleada para una cita muy especial. Unos 120 vecinos de Ansó han lucido sus vestimentas en la 54° edición del Día del Traje Ansotano. Además, este año ha sido más especial si cabe, por la recuperación de la diana floreada después de cuatro décadas. "A las cinco y media de la mañana las mujeres del ropero han empezado a vestir todos los trajes. Es un sacrificio que hacen con tanta ilusión y pasión que da gusto verlo", ha destacado la alcaldesa de Ansó, Blanca Alfonso.

Se trata del día grande en el que Ansó luce con orgullo sus raíces y la riqueza de haberlas mantenido con una variedad que la ha hecho merecedora del título de Fiesta de Interés Nacional. Los trajes de “bautismo”, “periquillo”, “cofradía” o “saya” son algunos de los que cada año se pueden contemplar durante el Día del Traje Típico Ansotano.

Además del tradicional desfile, no han faltado las escenas cotidianas de antaño que se representaron en hasta cinco rincones con música y actuaciones teatralizadas en el núcleo urbano. Lo vivieron con mucha "emoción" como explica una de las casas participantes. "Somos el rincón de Casa Rogante y mostramos todo el trabajo de la lana. Desde la lana recién esquilada, pasando por todo el proceso del hilado, el tejido de calcetines, camisetas...".

El premio especial este año ha recaído en la Fundación Cocorro. La residencia de la tercera edad cumple 50 años con una labor social "muy importante" por parte de muchos de sus usuarios, en cuanto a la conservación y donación de los trajes. "Queremos honrar de esta manera a todas las personas que han contribuido a tener el ropero municipal maravilloso. Han sido todo donaciones de la gente, de las casas..., y muchos de ellos están ahora en esta residencia", ha indicado la alcaldesa.