El Huesca pasa página para pensar en el Granada

Huesca

La SD Huesca regresará a los entrenamientos este martes tras dos días de descanso que han venido bien para desconectar de la derrota de Coruña, reflexionar y pensar ya en el siguiente encuentro con el Granada del domingo a las 21 horas en El Alcoraz. Sergi Guilló fue claro nada más acabar el partido y asumía la responsabilidad, aunque lógicamente el peso del mal juego debe recaer también en los jugadores que no estuvieron en muchos casos acertados ya que los goles llegaron precedidos de graves errores.

El equipo es consciente de ello, pero tampoco se puede pasar de ser el mejor equipo tras cinco jornadas con 10 puntos a ser el pero por perder 4-0 ante un Deportivo que tiene muy buena pinta esta temporada, aunque eso no debe ser excusa.

No se hicieron bien las cosas y hay que reflexionar, como dijo Sielva al final del choque, y pensar ya en un Granada que llega tras un mal inicio y que jugaba este lunes donde empató en Burgos que le deja colista con tan solo dos puntos y veremos cuales son las sensaciones que traen los de Pacheta tras este encuentro que cerraba la sexta jornada.

En la SD Huesca no se esperan novedades durante la semana y el técnico podrá disponer de todo el equipo, excepto las ausencias habituales de Jordi Martín, Javi Mier y Willy. Veremos si Albarracín con unos días más de entrenamientos puede empezar a entrar y lo mismo Dani Ojeda que estaba disponible, pero que no jugó en Coruña.

Las rotaciones han sido habituales hasta ahora por parte de Sergi Guilló y sorprendió la de Jorge Pulido que podría volver al once si todo va normal en la semana. Se vuelve a El Alcoraz donde el equipo se ha sentido más a gusto hasta ahora que en las salidas.

De los 10 puntos, 7 se han sumado en casa y 3 fuera con el Mirandés en Vitoria, pero en Ceuta y Coruña el equipo no ha estado a la altura y es algo de lo que habrá que corregir porque dos de las victorias en el estadio oscense llegaron en el añadido y no siempre saldrá cara.

Semana dura por venir de una derrota contundente, pero nadie en el vestuario quiere que afecte lo que sucedió en Riazor y recuperar las buenas sensaciones y alegría que había tras las cinco primeras jornadas.